Si bien inicialmente se señaló que el Servicio Electoral (Servel) actuaría como órgano, el 13 de noviembre ratificó que no prestará apoyo ni participará en la organización del evento al no estar dentro de sus facultades legales,[8][9] aunque proporcionará el padrón electoral que, debido a la rápida organización de la consulta, corresponderá al utilizado en las últimas elecciones realizadas en 2017,[10] sin embargo la Asociación está intentando combinar esto con el padrón del Registro Civil.
Además se comunicó que la consulta estaría abierta a todas las personas mayores de 14 años.
Las preguntas se encuentran repartidas a través de tres páginas o papeletas (en el caso del voto convencional).
La primera página intenta medir la aprobación hacia una nueva Constitución de Chile (y su mecanismo) al igual que la opinión pública en temas de financiamiento de los municipios, corrupción política y un IVA diferenciado a productos de primera necesidad; la segunda intenta identificar las demandas sociales (listando 11), y la tercera es una página abierta a preguntas específicas de cada municipio.
Algunos ejemplos de ellos son: Algunas comunas como Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea decidieron adicionalmente eliminar la primera papeleta correspondiente a la posible Asamblea Constituyente.
[46] Sin embargo, el día 5 de diciembre se anunció que la comuna realizaría su propia versión de la consulta ciudadana, llamada «Valdivia Decide», la que contaría con una estructura similar a la que se realizó a nivel nacional, incluyendo número de papeletas y fecha de realización.
[47][48] Río Bueno realizó una consulta alternativa, llamada «Río Bueno Decide» que se desarrolló el domingo 15 de diciembre desde las 9:00 y finalizó a las 17:00 horas.
La consulta ciudadana fue completamente auto gestionada por organizaciones sociales de la comuna, e incluía otras preguntas, algunas relacionadas con la realidad local, además de las realizadas por las otras comunas.
Participará, Se abstuvo, Sin información certera; • Voto electrónico.
[56] En comunas como San Felipe, el sistema de votación digital permitía votar solo utilizando el RUT, y en otras se solicitaba adicionalmente el número de serie del carnet, lo que fue considerado por varios expertos como insuficiente para asegurar la identidad de los votantes.