[7][8] Su capital y su ciudad más poblada es Morelia (antiguamente llamada «Valladolid»), que lleva su nombre actual en honor a José María Morelos.Entre ellos se encuentran El Opeño, el Curutarán, La Villita, Tepalcatepec, Apatzingán, Zinapécuaro, Coalcomán, San Felipe de los Alzati, Tzintzuntzan, Tingambato, Pátzcuaro, Zacapu, Uruapan y Tzitzio.Gran parte del territorio michoacano estuvo habitado por los purépechas que se desarrollaron como una cultura dominante e impusieron su hegemonía económica, religiosa, militar y cultural a los demás que también habitaban la región, como los nahuas, otomíes, matlatzincas o pirindas y tecos.[20] A finales del siglo XVIII, la influencia de las corrientes filosóficas europeas se dejó sentir en Michoacán.[20] En los colegios jesuitas se estudiaba la ciencia y la filosofía moderna: las ideas de Descartes, Bacon, Copérnico, Newton, La Condamine, Galileo, Kepler, Torricelli y otros eran vistas con simpatía, hasta que Carlos III ordenó la expulsión de los jesuitas en el año 1767.Del mismo combatieron los hermanos López Rayón en el oriente (Ramón, Rafael, José María y Francisco).No obstante, a comienzos de 1812 la ciudad fue atacada por el ejército realista comandado por Félix Calleja, quien les propició la huida.[35] En 1813, el mando de los revolucionarios cayó en José María Morelos,[36]a quien Hidalgo le había encargado levantar en armas a las poblaciones de Tierra Caliente, y que posteriormente haría incursiones exitosas en México, Puebla, Veracruz y Oaxaca.[43] En 1834 se instauró el centralismo en el estado, aunque no sin resistencia armada, como la que dispuso el general Gordiano Guzmán.[56] Durante el gobierno estatal del general Enrique Ramírez (de 1924 a 1928) no hubo resistencia a las reformas del presidente Elías Calles, por lo que fueron clausurados los seminarios y se dispuso que sólo los clérigos registrados podrían ejercer.[83][84] Además, presenta otras corrientes significativas como los ríos , Acalpican, Acaten, Acúmbaro, Cajones, Chiquito, Coahuayana, Coalcomán, Guacamacato, Nexpa-Aguililla, Purungueo-Grande, San Diego-Carácuaro, Toscano (Chula), Turicato, Tuxpan, entre otros.Asimismo, se recomienda su cultiva en altitudes entre 800 y 2500 m, en suelos arcillosos o franco-arcillosos con un buen sistema de drenaje.Asimismo, también fue el estado con mayor crecimiento en la producción de aguacate, en 1980 se produjeron 141 221 toneladas, y en 2018 1 674 855.En 2003 los principales municipios productores eran Uruapan, Tancítaro, Peribán, Tacámbaro, Nuevo Parangaricutiro, Salvador Escalante, Tingüindín, Ario, Los Reyes, Tingambato y Ziracuaretiro; con una producción total de 800 452 toneladas.Los principales municipios productores de ese año fueron Tancítaro, Salvador Escalante, Tacámbaro, Uruapan, Ario, Peribán, Nuevo Parangaricutiro, Los Reyes, Tingüindín, Turicato y Ziracuaretiro.[113] La población estatal está concentrada principalmente en el norte del estado, mientras que la densidad poblacional es baja en el sureste (Tuzantla, Tiquicheo, San Lucas, Huetamo, Turicato), así como en la Sierra Madre del Sur (Aguililla, Arteaga, Tumbiscatío, Coalcomán, Chinicuila); además el 53.1 % vive en poblaciones mayores de 10 000 habitantes, teniendo uno de los mayores porcentajes en este rubro en México.En la gráfica se muestran las 20 localidades con más población al año 2020 contando solo la ciudad, sin incluir área conurbada, municipio o zona metropolitana.[122] El cuarto idioma con mayor presencia es el mixteco, con 4304 hablantes[119] en los municipios de Buenavista y Lázaro Cárdenas, aunque tiene presencia en todo el estado debido a la migración del pueblo mixteco a territorio michoacano —es, pues, una lengua alóctona del estado—.[132] Su sede se encuentra hoy en la ciudad de Morelia, aunque cuenta con campus en otras ciudades michoacanas como Ciudad Hidalgo, Lázaro Cárdenas, Uruapan y Zamora,[133][134][135][136] además de varias unidades profesionales repartidas por el estado.[138] Así como los institutos tecnológicos superiores de Apatzingán, Ciudad Hidalgo, Huetamo, Los Reyes, Pátzcuaro, Purépecha, Puruándiro, Tacámbaro, Uruapan y Zamora.La cultura del estado está expresada en el legado prehispánico de sus primeros habitantes y en el legado español durante la época colonial del Virreinato de Nueva España, que a nuestros días es una fusión con perspectiva contemporánea.También se encuentran los centros históricos de diversas poblaciones con arquitectura típica tradicional como Pátzcuaro, o Tlalpujahua, entre otros.En el estilo moderno destaca la parroquia del Perpetuo Socorro, en Ciudad Hidalgo, siendo reconocida internacionalmente por su diseño innovador y único.Otros templos de pequeñas dimensiones pero de gran riqueza artística por su decorado folclórico y tradicional son los localizados en comunidades purépechas como la capilla del Señor Santiago en Tupátaro que conserva un antiguo artesonado pintado, elaborado en el siglo XVI.En Zitácuaro se encuentra la zona arqueológica San Felipe Los Alzati, de acuerdo con los arqueólogos que han explorado el sitio, data del periodo Posclásico, considerado por este hecho, que ahí se sitúo la frontera entre los Mexicas y los Tarascos.[152] Durante el siglo XX varios artistas plásticos michoacanos se han hecho de renombre; entre ellos destacan Antonio Sevín, Ángel Zamarripa, Alfredo Zalce, Luis Sahuagún, Feliciano Béjar y Rogelio Naranjo.[154] Durante el siglo XIX fueron reconocidos los compositores michoacanos Ramón Martínez Avilés, Francisco de Paula Lemus y Cenobio Paniagua.[152] Del anterior siglo, el mayor exponente de la música clásica en territorio michoacano fue Miguel Bernal Jiménez, aunque se hallan otros compositores importantes como Marco Jiménez, Miguel Lerdo de Tejada y Ramón Martínez Carrasco.La exuberante naturaleza, las tierras fértiles y el clima tropical de Michoacán han permitido que se geste en este lugar una tradición culinaria variada, abundante y milenaria, en su mayoría herencia de los pueblos prehispánicos que aquí vivían, como los purépechas.El baloncesto es el segundo deporte más practicado en el estado, siendo especialmente popular en la región de la Meseta Purépecha y Tierra Caliente (Michoacán).
Las yácatas en Tzintzuntzan.
Imperio Purépecha superpuesto al Michoacán moderno.