Acueducto de Morelia

Levantado durante el periodo colonial, a lo largo de su historia sufrió numerosas remodelaciones y reconstrucciones.

La obra desde su comienzo tuvo problemas continuos ya que, debido a su rudimentaria elaboración algunas de las partes tenían que ser reparadas y reemplazadas de forma constante.

Para financiar la obra, se autorizó en 1589 un impuesto sobre el vino para atender a su mantenimiento.

En 1646, se adjudicó otro tramo del acueducto a Lorenzo de Lecumberri, pero debido a la mala administración del dinero obtenido por el impuesto especial para el acueducto, los problemas entre el Cabildo y Lecumberri, se prolongaron 13 años, hasta que las obras se iniciaron en 1657 y paralizaron en 1659 al encarcelar al maestro.

El acueducto se conforma por 253 arcos de medio punto que alcanzan su máxima altura de 9.24 metros, cercano a la zona del Jardín Villalongín.

El acueducto de Morelia
Segunda caja de agua del Acueducto de Morelia, es la imagen que aparece al reverso de los billetes de 50 pesos.