Se convirtió en un paso o descanso necesario en el sitio llamado por los arrieros e indios de la comarca, Chicnahuatenco.
Legó una casa colonial llamada la Moreña, decorada con murales costumbristas, que se conserva como un monumento histórico y centro cultural.
Cuenta con la amplia sala para exposiciones temporales «Jesús Talavera», en homenaje a este importante museógrafo jalisciense.
Ella por sí misma dueña de las más importantes y enormes propiedades y haciendas en la zona comprendida entre La Barca, Jalisco, y Zamora, Michoacán, así como parte del Lago de Chapala, mismas que en su momento heredó nuestro personaje Francisco Velarde, debido a que sus dos únicas hermanas abrazaron a temprana edad la vida conventual.
Velarde a su paso entre Guadalajara y sus vastas propiedades se hizo notable por su boato, elegantes carruajes y gran escolta que siempre le acompañaban, así como su ornamentada forma de vestir.
Allí hizo plasmar los más bellos murales al temple que existen en todo nuestro país, en pasillos y corredores, utilizando temas mexicanísimos debidos al pincel de Gerardo Suárez, el más notable pintor local de la época a que nos referimos (1855).
Ello da perfecta muestra del buen gusto que tuvo tanto por lo tradicionalmente mexicano, así como por los muebles, vajillas, espejos y candiles traídos desde París.
La mayor parte del municipio está formada por tierras planas (93 %) y en proporción mínima existen zonas semiplanas (2 %) y accidentadas (5 %) formadas por elevaciones de los 1700 a los 2200 m s. n. m. (metros sobre el nivel del mar).
Las zonas planas son formadas por elevaciones de los 1600 a los 1700 m s. n. m., mientras que las zonas semiplanas alcanzan alturas de los 1550 a los 1600 m s. n. m. El territorio está conformado por terrenos que pertenecen al Período Cuaternario.
En la composición de los suelos predominan los tipos vertisol pélico, feozem háplico y cambiasol éutrico.
La vegetación está compuesta por mezquites, guamúchiles, magueyes, agaves y madroños.
El conejo, zorrillos, ardillas y la liebre pueblan este lugar, además de diversas aves, como tordos, gorriones, agraristas, y aves acuáticas como pelícanos borregones, gallaretas, patos, garzas, gallitos, soldaditos, correas, etc.
[6] Las principales actividades económicas son: agricultura, ganadería, pesca, servicios y transporte.
Además cuenta con centro culturales, plaza, museo, parques, jardines y biblioteca.
[7] Su construcción es generalmente a base de ladrillo, concreto y tabique.
La transportación se realiza en autobuses públicos o vehículos de alquiler y particulares.
El municipio cuenta con 72 localidades, siendo las más importantes: La Barca (cabecera municipal), Portezuelo, San José Casas Caídas, El Carmen, La Paz de Ordáz, San Francisco de Rivas y Villa García Márquez.