Literatura medieval española en prosa

En la época del rey Alfonso X el Sabio, la prosa narrativa evolucionó, beneficiándose del prestigio de las crónicas históricas, y se iniciará una prosa sapiencial de tipo científico, que pretendía compilar todo el saber medieval.

[10]​ Su producción más importante en la primera mitad del siglo XIII es la constituida por los romanceamientos de la Biblia.

[11]​ Estas vulgarizaciones acaban imponiéndose cuando el latín deja de ser comprensible; no obstante, esta divulgación traía como secuelas la libre interpretación y una mayor facilidad para caer en la herejía.

[22]​ No es tarea fácil precisar la fecha en que se comienza esta labor traductora, pero hay una cierta unanimidad entre los estudiosos en localizarlas en torno a los reinados de Fernando III el Santo y Alfonso X el Sabio.

[24]​ Entre sus características se cuentan: Ningún obstáculo hay, en principio, para que las mismas sentencias circulen en un contexto cristiano, árabe o judío.

En las adaptaciones y nuevas compilaciones se percibe un mayor interés por los temas de gobierno, convirtiéndose —por tanto— en un speculum principis.

[56]​ La mayor parte de estas traducciones hispanas están muy relacionadas entre sí, bien porque comparten fuentes, bien porque se influyen.

[57]​ Destacaremos los siguientes tratados: Las primeras «disputas» se habían plasmado por escrito a lo largo de la centuria anterior y en verso.

Por eso, uno de los afanes del monarca fue ordenar este caos al tiempo que afianzaba el poder real y su autoridad.

[65]​ Esta base jurídica se prolongó durante siglos, y su influencia llega hasta nuestros días.

Se organiza además en títulos (182) y leyes (2479), estas encabezadas por un epígrafe que indica su contenido de manera más o menos aproximada.

Alfonso X acomete esta tarea para exponer su pensamiento político y encontrar en el pasado razones que justifiquen tanto sus aspiraciones a la corona imperial como las relativas a construir un nuevo modelo político, constantemente rechazado por la nobleza.

Otra particularidad del género consiste en su concepción conscientemente literaria tanto en la elaboración como en su forma expositiva.

[70]​ Para contar la historia de España, Alfonso X se remonta a los orígenes hallados en las fuentes bíblicas, a Moisés, para continuar utilizando mitos y leyendas de la historia antigua griega y latina.

Según avanza el relato, aumenta la prolijidad en los detalles, sobre todo desde las invasiones germánicas hasta Fernando III, en que las fuentes más abundantes son crónicas y cantares de gesta peninsulares.

Rasgos de estos dos últimos juegos han llegado también hasta hoy en el backgammon y el alquerque[74]​ respectivamente.

Esta actitud ortodoxa, acorde con el cristianismo y la moral conservadora se conoce como «molinismo», cuyos principios básicos son: anteponer a Dios sobre todas las cosas, esforzarse en terminar las buenas obras y guiarse por la razón —el «seso natural»—.

[77]​ Ramón Menéndez Pidal calificó como «muy pobre y discutida» la actividad intelectual durante este reinado.

Por lo tanto, serían atribuibles a la corte del rey Sancho IV varias obras, clasificadas en: En esta categoría descuella el Libro del tesoro, traducción de Li Livres dou Tresor, enciclopedia compilada en Francia por Brunetto Latini entre 1260 y 1267 y después ampliada en Florencia (h. 1275).

A España llega solo la primera versión, de la que se conservan trece manuscritos.

[99]​ Conviene aclarar que, siguiendo al profesor Gómez Redondo, utilizaremos el término romance en este contexto para referirnos a las obras de ficción en prosa.

No en vano, los inicios literarios de Don Juan Manuel —entre 1320 y 1325— siguen la senda fijada por su tío Alfonso X para la prosa literaria: historia (Crónica abreviada), disposiciones jurídicas para la caballería, su estamento (Libro del cavallero et del escudero) y entretenimiento.

Por tanto, no es raro que en el siglo XIV adquieran especial valor las crónicas reales y con ellas la figura del canciller Pero López de Ayala.

[118]​ Los textos más destacados de este género son: La cuentística sufre, en esta segunda mitad del siglo, una curiosa evolución: apenas hay género literario que no incluya exempla en muchas de sus manifestaciones, pero no se realizan colecciones concretas.

Sin embargo, éste no es posible por varias razones, como la ignorancia de las lenguas clásicas por quienes pudieron protagonizarlo, excepto Villena.

Las principales compilaciones de este periodo son: La ficción necesita, ante todo, un público que se vea reflejado en ella.

En esta centuria el público de los romances exige que se le preste una atención mayor.

En primer lugar se encuentra el Cancionero de Baena, cuyo prólogo dibuja ya un cortesano nuevo.

Los Reyes establecieron una política exterior común marcada por el carácter diplomático de Fernando el Católico, que supondría la hegemonía hispánica en Europa durante los siglos XVI y XVII.

Se incluye dentro del archigénero épico o narrativo y se compone en prosa con versos intercalados, a veces en forma epistolar; posee temática amorosa, frecuentemente dentro de las leyes del llamado amor cortés.

Alfonso X de Castilla y su corte. El rey fue el máximo promotor de la literatura medieval en España.
Página del Liber regum .
Miniatura de la Biblia escurialense .
Libro de los doce sabios .
Una versión siria del Sirr al-asrar contemporánea al Poridat de poridades castellano.
Manuscrito de Calila y Dimna .
Página del Sendebar .
Fuero real .
El Lapidario .
Alfonso X
Historia de la doncella Teodor .
Alfonso X el Sabio y las Partidas .
Manuscrito de la Estoria de España .
Manuscrito de la General estoria (códice de El Escorial) de Alfonso X el Sabio .
Problema de ajedrez n.º 35 del Libro de los juegos .
Libro del tesoro .
Castigos de Sancho IV .
Folio de la Gran conquista de Ultramar .
El Livro del cavallero Zifar , primera relato de ficción extenso de la literatura española.
Don Juan Manuel.
Libro del conocimiento .
Manuscrito de la Embajada a Tamorlán .
Crónica de Juan II , en una edición de 1543.
El infierno de los enamorados, obra del Marqués de Santillana.
El Corbacho , obra de Alfonso Martínez de Toledo , el arcipreste de Talavera.
Visión deleitable .
Los doce trabajos de Hércules , de Enrique de Villena.
Libro de las claras e virtuosas mugeres .
Compendiosa historia hispánica , obra de Alfonso de Palencia.