El Victorial

[1]​ La obra se divide en un prólogo introductorio (proemio) y el grueso de la narración, que alberga tres partes bien diferenciadas.

Esto ocurrirá cuando la reina doña Juana le proponga a Juan Niño, padre del protagonista, mudarse a la corte con su familia, para que su mujer fuese la nodriza del infante Enrique, futuro Enrique III.

Sus primeras enseñanzas las recibió por parte de su madre junto al príncipe Enrique, siendo los dos prácticamente hermanos, lo cual privilegió exponencialmente el buen aprendizaje del joven Pero Niño.

Poco después, muere Enrique III, con quien se había criado desde su infancia y era un importantísimo apoyo en la corte.

En este duelo saldría victorioso Pero Niño, demostrando que la nobleza es capaz de imponerse a los monarcas.

[1]​ Aunque la biografía es favorable al conde de Buelna, Gutierre no cae, empero, en la adulación.

En todo caso, es importante recalcar que la influencia de Games no es tanto peninsular, sino francesa e inglesa.

Games se olvida de las opiniones que tenían los demás estamentos sociales sobre este panorama.

Por tanto, ignora la perspectiva nobiliaria y la influencia de esta en el ideal caballeresco.

Además de las ya mencionadas influencias bíblicas y grecolatinas que se hacen más evidentes a lo largo del libro, es curioso ver cómo Games prescinde del rey Arturo en su modelo de los nueve varones.

Se presentan en El Victorial de forma clara varios tópicos e imágenes heredadas del ideal caballeresco francés.

Partiendo desde su nacimiento, donde se vaticina para Pero Niño desde un principio un futuro brillante y lleno de grandes hazañas, lo cual era muy común en las historias caballerescas medievales.

Games aporta un elemento único en la crónica castellana al incluir en su relato los amores y la vida personal de Pero Niño.

Es de esta manera, que se puede apreciar fácilmente la influencia del amor cortesano francés.

Portada de El Victorial , manuscrito BNE Ms. 17648 f.1r