En la cuadra siguiente, entre Bouchard y la Avenida Leandro N. Alem, se encuentra otro Monumento Histórico Nacional: el monumental Palacio de Correos.
[12] Unos metros hacia el este, se destaca sobre esa misma vereda la Torre Club Alemán, también sede del Instituto Goethe.
Si bien este tramo se caracteriza por el entretenimiento, la cultura y la gastronomía, aún hay gran cantidad de edificios utilizados exclusivamente para oficinas comerciales.
Por su escenario pasaron grandes figuras como Florencio Parravicini, Gloria Guzmán, Mecha Ortiz, Alberto Closas, Margarita Xirgu, Miguel de Molina y María Antinea.
Sus 30 000 m² cubiertos se reparten en cinco subsuelos, cuatro niveles y tres cuerpos, de doce pisos.
En 1958 el Teatro Apolo estaba cerrado y próximo a ser demolido para construir un edificio con galería comercial en la planta baja.
Entre Montevideo y Rodríguez Peña, en la vereda norte, se halla el Teatro Astral, con fachada de estilo Luis XVI oculta por los carteles.
Antes de llegar a la Avenida Callao se encuentran en su intersección con Rodríguez Peña los teatros El Vitral y Buenos Aires.
En lo que a cine se refiere, también se destacan, el BAMA -Buenos Aires Mon Amour- (hoy sala de cine arte que ha recibido denominaciones como Teatro Arte, Cine Hall o Arteplex Centro) con entrada por galería contigua al Teatro Broadway al 1100, el Lorca (rebautizado con ese nombre por el excrítico cinematográfico devenido en militante ecológico Javier Rodríguez Pardo y cuyo edificio actual fue inaugurado con el nombre de Cine Lion en 1968) al 1400 y el Cine-Teatro Premier al 1500, construido en 1944 con tres pisos visibles a través de un gran ventanal con vidrios enmarcados en varillas de bronce en su frente y dos estatuas del escultor Ferrari que se yerguen a ambos lados, actualmente ocultas por su marquesina y hasta -en algunos casos- por avisos de índole político.
En el local 17 de la misma galería encontrarán un lugar con música alternativa, novedades y clásicos, la disquería Oíd Mortales.
Damián Carlos Hernández (1923-1987), su fundador, tuvo que cerrar la librería y se exilió en 1977 al ser perseguido por la dictadura militar y su censura, pero logrando salvar colecciones enteras como CP del desaparecido editor Carlos Pérez o la de La Rosa Blindada dirigida por José Luis Mangieri, que Hernández supo ocultar en su sótano.
En el hall del Teatro Municipal General San Martín (Corrientes 1530) se encuentra en un stand la Librería Teatral Salort, especializada en textos de y sobre dramaturgos.
De Esmeralda a Callao hay numerosos cafés, restaurantes (casi todos pizzerías) y confiterías tradicionales.
Una anécdota cuenta que el magnate, trabajando como mozo, le sirvió un café a Carlos Gardel, allá por 1924.
En la cuadra del 1400 se encuentra la bombonería Bombonella, fundada en 1941, que produce todo tipo de chocolates en forma artesanal.
Su fundador fue el español Victoriano López Robredo, que había vivido cuarenta años en Ceilán, Singapur y las Filipinas.
En dicho tramo, del lado sur, se hallan tres galerías muy grandes con locales comerciales: Entre las dos primeras se halla el edificio Casa Grimoldi diseñado por Virginio Colombo como edificio de renta para el empresario zapatero Alberto Enrique Grimoldi e inaugurado en 1918.
Al cruzar la avenida Pueyrredón nos adentramos en la llamada "patria chica" de Carlos Gardel, el Morocho del Abasto (o Zorzal Criollo).
Erróneamente se ha dicho que este edificio inspiró a Baldomero Fernández Moreno para escribir su famoso poema "Setenta balcones y ninguna flor".
Cuenta además con un tango boutique donde se pueden encontrar diseños temáticos en indumentaria profesional, libros, artesanías y talabartería en general.
Su apertura fue prácticamente simultánea al viejo Mercado del Abasto de la ciudad, conviviendo ambos en glorias y decadencias.
Enfrente en Corrientes 3587 se encontraba La Casa del Queso hasta inicios de 2017, en que tras su cierre intempestivo los trabajadores intentaron continuar con una cooperativa, sin lograrlo.
Al 4400, del lado norte, entre las calles Pringles y Yatay, se encuentra el templo católico de Jesús Sacramentado.
[34] Hacia 1905 comenzaron a trasladarse cerca del actual cruce de la calle Gurruchaga con Corrientes un grupo de inmigrantes sefarditas, convirtiéndose desde entonces esta zona en un tradicional barrio judío, en el que se puede encontrar pan sin levadura para Pésaj y otras especialidades todo el año.
Era lujoso y como las películas que en él se exhibían eran mudas, la trama era acompañada por la orquesta de Charles Marchal.
Era vecina a La Helvética, en Corrientes al 512, y había sido inaugurada en 1942 por la refugiada alemana Lilí Lebrach, quien difundía allí literatura no nazista.
Solía acudir allí Florencio Parravicini, razón por la cual a esa esquina en 1959 se le dio el nombre de dicho actor.
En su local, abierto las 24 horas y sito en el n.º 1537, tocó en 1923 la primera mujer bandoneonista: Paquita Bernardo, "la flor de Villa Crespo".
Admirada y solicitada, tuvo una vida efímera, ya que falleció en plena fama a los 25 años de edad.
Fue creado por el empresario italiano César Ciacchi, quien en 1878 firmó con un tal Zamudio, dueño del terreno, un convenio por diez años para construir un teatro que, con frente de ladrillos rojo, fue inaugurado al año siguiente.