[2] Fue construida por el arquitecto Alejandro Virasoro para funcionar como residencia de Enrique Lastra, aristócrata porteño, en el año 1925.
Había grandes expectativas por la llegada del primer embajador de Israel en Argentina y Uruguay.
Allí se encontró con dos argentinos que le sugirieron comprar en Buenos Aires una casa en un barrio distinguido, destinada a ser legación y vivienda.
Las tratativas se habían realizado con la familia Mihanovich, que tenía su residencia en el número 910 de la calle Arroyo.
Un cuarto piso —pequeño— fue construido años más tarde y también había un sótano.
[5] El ataque terrorista a la embajada ocurrió el 17 de marzo de 1992 a las 14:45 (hora local) cuando un furgón Ford F-100 conducido por un suicida fue cargado con explosivos y estrellado contra el frente del edificio causando la destrucción de la embajada, y daños a una iglesia católica y una escuela ubicada en un edificio cercano.