Guerra de Restauración portuguesa

[40]​ Especial inquina hacia los Habsburgo mostraba la Orden jesuita, que había tenido varios conflictos con la Corona y Castilla desde el comienzo de la unión.[22]​ Existía un claro hartazgo de la presión fiscal que debían soportar los portugueses y el pueblo comenzaba a manifestarse en las calles.[54]​ Estos movimientos se propagaron por otras regiones del reino, con la intención de deponer la dinastía filipina y entronizar nuevamente una portuguesa.Se realizan importantes solicitudes de soldados que debían marchar hacia Cataluña, a costa del tesoro portugués.[37]​ La alta nobleza, los llamados fidalgos, principales ostentadores de señoríos en Portugal, permanecieron en conjunto fieles a Felipe IV o terminaron exiliándose.[71]​ Los rebeldes lo presentaron como una restauración de lo que consideraban el orden legítimo frente al tiránico y extranjero representado por los Austrias españoles.[104]​ Las advertencias a estas para que se mantuviesen fieles al rey Felipe, sin embargo, en general no surtieron efecto.[127]​ En el Alentejo, las principales poblaciones que se fortificaron fueron Évora, Campomayor, Jurumeña, Ouguela, Elvas, Estremoz, Monsaraz, Olivenza, Beja, Moura y Serpa.[133]​ La principal desventaja se hallaba en la caballería, normalmente inferior en número a la enemiga, debilidad especialmente grave en la zona del Alentejo, por ser llana.[187]​ Felipe IV no podía reunir dos grandes ejércitos para combatir simultáneamente en Cataluña y Portugal, lo que benefició a los portugueses, carentes al comienzo del alzamiento de tropas adecuadas o fortificaciones fronterizas que hubiesen podido detener una acción decidida de los Habsburgo si estos hubiesen optado por dar prioridad al frente portugués.[209]​ Inglaterra estaba, en ese momento, envuelta en su propia guerra civil, en la que Portugal tomó partido por el bando realista aportando armas.[60]​[211]​ Los portugueses reconocían los asentamientos ingleses en Guinea, obtenían dos años de plazo para decidir si concedían privilegios comerciales a Londres en Brasil y prorrogaban la tregua vigente en la India.[246]​ El tratado supuso en la práctica la cesión de buena parte del comercio portugués a la pujante marina mercante inglesa.[234]​ En contrapartida Portugal recibió la necesaria ayuda militar en su conflicto con España,[247]​ tanto en la península ibérica como en las colonias, y colaboración diplomática.[293]​[294]​ El sector del Alentejo-Extremadura tenía los centros de mando en Elvas —el portugués, hasta que en 1661 se mudó a Estremoz— y Badajoz —el español—.[335]​ En julio de 1641, fracasó una conjura que pretendía dar un contragolpe en Lisboa, asesinar[336]​ al rey Juan y devolver el poder a la virreina.[345]​[202]​ Para cuando la flota llegó ante Cádiz, sin embargo, la zona había sido reforzada, el duque detenido y no se produjo la esperada rebelión que debían apoyar las tropas embarcadas.[395]​ Los neerlandeses, por su parte, acudieron al congreso en 1646, pero para comienzos de 1647 ya habían alcanzado un acuerdo preliminar con la corte madrileña y con ello su apoyo a los portugueses, con quienes seguían disputándose los territorios brasileños menguó.[311]​ El sufragar los gastos del ejército suponía una gran carga para la región que debía soportar, por añadidura, los abusos de la tropa.[413]​ Pese a las actividades ilegales de estas bandas, resultaban fundamentales para la defensa fronteriza, dada la ineficacia del ejército regular.[426]​ Los ingresos no permitían siquiera mantener las guarniciones existentes, menos aún pensar en campañas ofensivas y la necesidad de evitar el descontento era fundamental.[470]​[471]​ Los doce mil hombres que había traído a socorrer Badajoz quedaron en la mitad en apenas un mes, por las grandes deserciones de los milicianos, reclutados apresuradamente durante el verano.[473]​ Pese al desbaratamiento del sitio, este costó siete mil bajas a los encerrados en la plaza, entre soldados y civiles.[476]​ Portugal solicitó la mediación del rey francés para poner fin al conflicto, pero Felipe IV rechazó todas las propuestas de concertación que se le hicieron.[239]​ El alto mando español planeaba traspasar parte del ejército de Flandes y Milán al frente portugués para contar con fuerzas veteranas que pudiesen poner fin a la larga contienda mediante una invasión.[487]​ Las relaciones del contingente británico con la tropa y la población portuguesa fueron tirantes desde el comienzo, en parte por el comportamiento de las tropas francesas (setecientos cincuenta hombres al mando del hugonote Federico de Schomberg) que había indispuesto a la población contra los extranjeros y en parte por las diferencias religiosas, ya que los británicos eran protestantes.[368]​ La toma, sin embargo, desbarató la trashumancia de los rebaños hacia Extremadura e hizo que los españoles evacuasen algunos lugares como Arronches.[544]​[534]​ De hecho, Portugal había firmado una alianza con Francia en marzo, que hizo a Madrid temer un ataque naval conjunto franco-portugués.[550]​ Portugal consiguió con la dilatada guerra la restauración la independencia de España y demostró que podía valerse por sí mismo, aunque con dificultad.Sin embargo, el país permaneció económicamente débil, con su agricultura subdesarrollada, dependiente del grano inglés, y con sus habitantes en general hambrientos de bienes extranjeros, especialmente textiles.
Margarita de Saboya, duquesa de Mantua y Montferrato, virreina de Portugal, en un retrato de Frans Pourbus (1569-1622).
João II, duque de Braganza quien posteriormente sería coronado como rey João IV de Portugal .
Representación de la defenestración de Miguel de Vasconcelos .
Felipe III de Portugal y IV de España , el monarca desposeído de Portugal por el golpe de diciembre de 1640, que intentó recobrar vanamente hasta su muerte en 1665, si bien ya en 1664 había emprendido contactos para acabar con la dilatada contienda.
Tratado de los Pirineos . Entrevista de los monarcas en la isla de los Faisanes .
Captura de Cochín y la victoria de la VOC holandesa sobre los portugueses en 1656, en la costa de Malabar . Atlas Van der Hagen, 1682.
Evolución del Ejército del Alentejo. Según White (2003), p. 82.
Mapa del cerco portugués durante el asedio de Badajoz (1658)
Friedrich von Schönberg, primer duque de Schönberg , dirigió tanto a soldados portugueses como a tropas extranjeras.
Juan José de Austria , bastardo real y jefe del ejército de los Habsburgo españoles que llevó a cabo la mayor penetración en Portugal de toda la guerra antes de ser vencido estrepitosamente en Estremoz en 1663.
La última gran batalla de la guerra y la más sangrienta: la victoria portuguesa en Villaviciosa/Montes Claros , representada en un grabado italiano del siglo XVII .
La Cruz de la Orden de Cristo y la Cruz de Borgoña , en paño blanco (o colores de fondo variados, como cuartos en verde y blanco en algunos regimientos portugueses) fueron los estandartes más utilizados por los regimientos de Portugal y los tercios de España en los campos de batalla, respectivamente [ 557 ]