Évora

Évora o Ébora[2]​[3]​[4]​ es una ciudad portuguesa, capital del distrito homónimo.

A los habitantes de esta ciudad se los conoce como eborenses, con -b-, tanto en portugués como en español.

[8]​ Las hipótesis alternativas son que el nombre se deriva de oro, aurum, (oro)[9]​ ya que los romanos tenían una extensa extracción de oro en Portugal; o puede haber sido nombrado en honor a los trabajadores del marfil, porque ebur (genitivo eboris) es marfil en latín.

Viñedos, olivares y campos de arroz son también parte del paisaje.

La temperatura media anual es de 16.5 °C, pero las variaciones mensuales de temperatura son grandes, el promedio mensual más alto se produce en agosto (24,1 °C) y más bajo en enero (9,6 °C).

Otro pueblo con estas características fue Castillo de Giraldo, habitado continuamente desde el tercer milenio hasta el primer milenio antes de Cristo, el cual fue posteriormente ocupado esporádicamente durante la época medieval.

Según una leyenda popularizada por el humanista y escritor eborense André de Resende (1500-1573), Évora fue sede de las tropas del general romano Sertorio que, junto a los lusitanos, enfrentó a las tropas del Ejército romano.

[15]​[17]​ Lo que se sabe con certeza es que Évora fue elevada a la categoría de municipium bajo el nombre de Ebora Liberalitas Julia, en honor a Julio César.

Ciertamente fue en este contexto que se trazaron los cimientos del urbanismo romano de Évora, entonces integrada en la provincia de Lusitania, y se fundaron sus principales edificios públicos.

Sin embargo, con la excepción del templo imperial y de las termas públicas, pocos vestigios se han conservado hasta la actualidad.

Durante la dominación musulmana, la ciudad experimentó un nuevo periodo de esplendor económico y político gracias a su ubicación privilegiada.

La zona de extramuros todavía contaba con un barrio judío y una morería.

[15]​ En los siglos XVII y XVIII fueron renovados o construidos desde cero en estilo manierista edificios importantes de la ciudad.

El ejército portugués, en inferioridad numérica, intentó detener a una división francesa-española comandada por Louis Henri Loison, pero fue derrotado.

[20]​ En el siglo XIX, Évora pasó por muchas transformaciones urbanas, algunas de dudosa calidad.

[15]​ Los monumentos más destacados son el antiguo palacio del arzobispo, convertido actualmente en museo regional y la catedral, construida en 1186 y originalmente de estilo románico, pero reconstruida con estilo gótico en el siglo XV.

[22]​[23]​[24]​ El municipio de Évora cuenta con diez zonas y parques industriales.

Igualmente importantes son los olivares, viñedos, cultivos de regadío (arroz) y la ganadería.

[27]​ La ciudad cuenta con varios hoteles, incluyendo cadenas de lujo, así como pensiones y hostales típicos.

[22]​ Las tiendas tradicionales están ubicadas principalmente en el centro turístico de la ciudad, mientras que las grandes áreas comerciales se concentran principalmente en la freguesia de Horta das Figueiras.

Catedral de Évora y fuente en la plaza de Portas de Moura
Nuevo fuero de Évora, concedido por el rey Manuel I .
Una representación de Évora en 1503, cuando la ciudad estaba floreciendo con las riquezas de los descubrimientos.
La catedral forma parte del centro histórico de Évora , declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1986
Plaza del Giraldo