Durante la Segunda Guerra Mundial, Campo de Ourique sirvió de refugio a muchos judíos, y más tarde, en 1958 tuvo lugar la campaña electoral de Humberto Delgado.
Una de las calles más conocidas es la Ferreira Borges que se asemeja a una avenida arbolada, conocida también por sus cafés, que sirvieron como punto de encuentro de varias figuras de la cultura y la política portuguesa, como por ejemplo, “Café Latino”, “A Tentadora”, “Ruacana” y “Canas”.
[2] En la actualidad, es un barrio residencial con una gran tradición comercial.
Es un barrio con vida propia, Campo de Ourique se parece con una pequeña ciudad dentro de la Gran Lisboa.
Datos según el nomenclátor publicado por el INE portugués.