[5] Tras su muerte, los confucionistas impusieron de nuevo su visión del mundo, por lo que en los siglos siguientes se impulsó el aislacionismo.
No obstante, Zheng He dejó una profunda huella en la sociedad china y, en general, en todo el sureste asiático.
[22] Zhu Di era once años mayor que Ma He y se convirtió más tarde en el emperador Yongle.
[43] Sin embargo se mostró muy respetuoso con las demás religiones con las que se encontró, sobre todo el budismo y el taoísmo, como se ve en la inscripción de Galle, y mostrando devoción a Tianfei, la diosa china del mar, según puede verse en las inscripciones de Liujiagang, y Changle, lo que refleja el papel central de la diosa en la flota del Tesoro.
[44] A destacar que como eunuco castrado antes de la pubertad, Zheng He no tuvo descendencia biológica.
Los desarrollos tecnológicos en la construcción naval y en las artes de la navegación marítima alcanzaron un alto nivel con la dinastía Ming.
[46] La dinastía Song (960-1279) construyó una armada bien equipada y en el siglo XII los chinos se convirtieron en una potencia naval verdaderamente formidable.
[47] Los juncos chinos de varias velas contaban con timones fijos y compartimentos estancos, una innovación que permitía reparar en el mar los barcos parcialmente dañados, y usaban brújulas para navegar a través del Mar del Sur de China.
Su flota naval no pudo evitar la invasión del poderoso emperador mongol Kublai Kan, que conquistó China en 1279.
Hongwu también decretó que ningún buque oceánico podría tener más de tres mástiles, un dictado punible con la muerte.
Para dominar las rutas comerciales que unían China con estos mares, el emperador decidió reunir una impresionante flota, cuyos barcos tendrían tantos mástiles como fuera necesario, y el hombre que eligió como su comandante fue Zheng He.
Otros expertos creen que los buques probablemente tenían cinco o seis mástiles, y medían 75 a 90 metros de largo.
Su timón compensado podía ser levantado o bajado, aumentando también la estabilidad al funcionar como una quilla extra.
Este incluía diplomáticos, exploradores, oficiales médicos, astrólogos, traductores a todos los idiomas del Asia oriental, tripulaciones de barcos y personal militar que, junto con cañones, bombas y cohetes, aseguraron que la expedición pudiera defenderse dondequiera se aventurara.
[62] Para la navegación se utilizaba ya la brújula magnética, inventada en China en el siglo XI,[67] cartas y mapas de papel.
[79][80] El objetivo inicial era llegar hasta Calicut en la India, para comprar pimienta a cambio de sedas y porcelanas.
Parece que este viaje se realizó sin Zheng He, que se quedó atrás para cumplir con dos tareas importantes: restaurar el templo de la diosa Tianfei en Meizhou,[90] que le había protegido tanto a él como a sus compañeros durante el largo y peligroso primer viaje,[91] e inaugurar una escuela de intérpretes en Nankín, para llevar a cabo futuras expediciones.
Los chinos entregaron un nuevo sello al sultán Parameswara de Malaca (el anterior había sido robado por los siameses),[99] que simbolizaba el apoyo chino a la monarquía local frente a las reivindicaciones siamesas de soberanía sobre esa región.
En los jardines que la rodeaban, se encontraban plantas y animales obtenidos gracias a las expediciones de Zheng He.
[114] Luego Zheng He se dirigió a las islas Maldivas para adquirir ámbar gris, que valía su peso en oro, antes de proseguir hasta la lejana Ormuz, sin entretenerse en Sri Lanka o Calicut.
[116] El emperador Yongle enviaba sus regalos al rey anterior, y Sekander atacó a Zheng He.
[124] Más tarde, los barcos cruzaron las turbulentas aguas de Bab el-Mandeb hasta llegar a la costa africana.
[130] Mientras Zhou Man condujo la flota principal hacia Adén y África, Zheng He volvió rápidamente a China adonde llegó en noviembre de ese mismo año.
[156] Se dice que Zheng He, como musulmán devoto, aprovechó esta última expedición para peregrinar a La Meca.
Sin embargo, sus zapatos y un puñado de sus cabellos fueron llevados a Nankín para ser enterrados en una cueva budista.
[158] La flota llegó a China en julio de 1433,[159] y los embajadores fueron presentados al emperador en septiembre portando regalos, entre ellos cinco nuevos qilin.
[163] Más tarde, causaron una crisis política en China cuando lo liberaron después de que su medio hermano ya había ascendido y declarado la nueva era Jingtai.
[48] Ante la pregunta de ¿porqué China, cuando se encontraba en la cima de su poder, con una economía floreciente y un poder científico, tecnológico y militar sin parangón, decidió encerrarse en sí misma y disolvió la flota de Zheng He?, la respuesta puede estar sobre todo en la magnitud de los proyectos civiles que llevó a cabo la dinastía Ming, sobre todo con el emperador Yongle, que debieron someter a la población a una enorme carga y vaciar las arcas del tesoro:[168] Algunas otras razones que pudieron influir para el fin de la flota del Tesoro pudieron ser: Por lo tanto, se abandonó la Flota del Tesoro debido a su prohibitivo coste, ya que no reportaron grandes beneficios a la corte imperial e, incluso, podían crear un déficit financiero.
En realidad, China mantuvo su comercio marítimo, con un cese de corta duración en 1551 bajo el emperador Jiajing.
[197] Los primeros portugueses que llegaron a la India oyeron hablar de los viajes chinos, pero sin encontrar detalles precisos.