En la primera mitad del siglo XX surgieron los edictos policiales que institucionalizaron la criminalización de travestismo y la homosexualidad.Inicialmente son los varones gais quienes logran un nivel considerable de militancia y organización, creando en 1984 la Comunidad Homosexual Argentina (CHA).[9] En las áreas yungas, existieron varias sociedades matriarcales, que también consideraban sagradas las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo y el uso de vestimentas correspondientes a otro género.Hacia finales del siglo XIX ya existía "una cultura de hombres que se identificaban a sí mismos como «maricas»" en Buenos Aires.[48] Las cartas citadas por Mercante reflejan aquella realidad de amor lésbico adolescente: En 1914 se estrenó la primera obra cuya temática central fue la homosexualidad y el travestismo, Los invertidos, del autor anarquista José González Castillo, padre del conocido compositor de tango Cátulo Castillo.La obra es una tragedia en la que un hombre casado, el Dr. Flórez, tiene una relación amorosa con su mejor amigo y termina suicidándose.Las siguientes décadas los edictos policiales serían usados para reprimir básicamente dos situaciones: vestir prendas del «sexo opuesto» (2H) y escándalo público e incitación al acto carnal (2F).[61] En 1931 Jorge Luis Borges publicó en la revista Sur un artículo titulado «Nuestras imposibilidades» en el que se refiere a «los caracteres inmediatamente más afligentes del argentino... de las ciudades».[64] La prensa argentina publicó largas listas de personas famosas a quienes se atribuía participar en las fiestas.Uno de los mencionados fue Roberto Noble, futuro fundador del diario Clarín, quien publicó una declaración negando haber participado en las orgías.[58] Su confesor, el padre Hernán Benítez relata que un obispo le dijo una vez: "-¿No me explico como usted puede defender a esa puta?[74] El sociólogo y activista LGBT+ Juan José Sebrelli la definió como "una especie de Jean Genet femenino".El propio Miguel de Molina en su autobiografía relata cuando una persona del aristocrático Barrio Norte le deseó la muerte por «maricón y peronacho».La ambigüedad de Eva frente a la homosexualidad se refleja en otra anécdota contada por el diseñador, con motivo de haber sido detenido con un amigo en un bar, y al llamarla para que los liberara ella le contestó: “¿Y qué hacen ahí ustedes a estas horas?Más en las sombras se ubicaban la prostitución urbana masculina, el lesbianismo y los lugares públicos utilizados para cruising.[83] A partir de ese momento, la figura del chongo, estará presente en el imaginario gay argentino y en la incipiente literatura LGBT+.En 1963 realizan Primero yo, cuyo título alternativo fue Machito, sobre un hijo que desea ser bailarín y debe enfrentar la oposición de su padre, donde retrata la comunidad LGBT+ relacionada con las artes y la danza de Buenos Aires, «sin caricatura, sin burla, por primera vez en el cine argentino».[109] En 1964 Ediciones Tirso publicó la novela Asfalto, la segunda escrita por Renato Pellegrini, con prólogo de Manuel Mujica Láinez, primera novela argentina centrada en el amor homosexual entre hombres sin asomo de culpa o patología, en una época en que el tema era tabú, especialmente en América Latina.[102] Destacando la importancia de Asfalto, el crítico estadounidense Herbert Brant sostiene que: En esta época fue escrita también la novela La brasa en la mano, de Oscar Hermes Villordo, aunque solo fue posible publicarla dos décadas después, cuando el país se preparaba para conquistar definitivamente la democracia.[87] Allí estaban también entre otros Rubén Massera, Pepe Bianco, Manuel Puig, Teddy Paz, Juan José Sebrelli y Adelaida Gigli, la única mujer.Entre las personas que integraron el FHL se encontraban también Marino Suárez, Ricardo Lorenzo, Marcelo Benítez, Eduardo Todesca, Alejandro Jockl, Néstor Latrónico, Juan Carlos Vidal, Jorge Luis Giacosa, Daniel Molina, Gustavo Zampichiatti, Rubén Mettini y Ruth Mary Kelly.[124] Durante el gobierno de Cámpora, la represión policial a los homosexuales prácticamente desapareció, inaugurándose una «primavera» de dos meses en la que gais, lesbianas y trans se manifestaron y fueron recibidos por vez primera por altos funcionarios del Estado, algo impensable apenas unos meses antes.Al menos 400 personas con identidades u orientaciones sexuales LGBT+ fueron detenidas-desaparecidas durante la última dictadura, siendo sometidas por ello a tratos especialmente degradantes e inhumanos.[138] El informe fue silenciado en la prensa argentina, pero fue difundido por algunos medios de comunicación ubicados en Brasil, Francia y Suecia.En 1981 Sandra Mihanovich lanzó el simple "Puerto Pollensa" compuesto por Marilina Ross, que sería adoptado como un himno del amor homosexual.[129] Carlos Figari recapitula en su libro Eróticas de la disidencia en América Latina la situación de las sexualidades disidentes en ese momento: La investigadora Ana Gabriela Álvarez cuenta que para la comunidad travesti la situación fue aún peor: La estrategia del movimiento se focalizó en lograr visibilidad.[160] En 2003 Buenos Aires se convirtió en la primera ciudad latinoamericana en reconocer legalmente las uniones civiles entre "dos personas con independencia de su sexo u orientación sexual", al sancionar la Ley N.º.[187] El mismo año, la canción y video «Disciplina» de Lali Espósito, aborda la sexualidad BDSM, con un fuerte impacto internacional.[191] Contradictoriamente con aquellas expresiones, diversas publicaciones han llamado la atención sobre manifestaciones homofóbicas del presidente y su equipo.Sostuvo que "en sus versiones más extremas la ideología de género constituye lisa y llanamente abuso infantil.
Cerámica representando relaciones sexuales entre varones en la
cultura moche
.
Noticia de
Caras y Caretas
de 1902, relatando la detención de una indígena
transgénero
en
Viedma
,
Río Negro
, quien «servía como madrina en los bautismos, siendo muy obsequiado por los vecinos de aquellos lejanos lugares».
Representación de las torturas en el
Museo de la Inquisición
de
Lima
, donde eran enviadas para ser juzgadas por
sodomía
, las personas que mantenían relaciones sexuales con personas del mismo sexo y quienes vestían prendas consideradas inadecuadas para su género.
La estatua de Giuseppe Mazzini en la actual
plaza Roma
era el principal lugar de encuentro de los hombres homosexuales de Buenos Aires en la época del Centenario.
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"La bella Noé", travesti porteña de principios de siglo
XX
que estafaba haciéndose pasar por viuda.
Foto de las carrilches en 1945 en Buenos Aires. En esos años, las "carrilches" organizaban fiestas clandestinas en quintas del conurbano, lejos de la policía. De izquierda a derecha: Jorgelina, Chacha, Sonia la indomable, Malva Solís y sanjuanino. Casamiento de Jorgelina.
Witold Gombrowicz
, él mismo un disidente sexual, publicó en 1953 su novela
Trans-Atlántico
, obra pionera de la literatura LGBT+ argentina donde aparece el personaje de Gonzalo Andes, alias "el Puto".
La célebre travesti francesa
Coccinelle
, una de las primeras en operarse para cambiar de género, visita la Argentina en 1962, causando un efecto profundo en la población y en la comunidad «marica», estableciendo un modelo de mujer trans que tomaría el nombre de «travesti».
Folleto de Frente Liberación Homosexual de diciembre 1972.
Folleto de Frente Liberación Homosexual de enero de 1976.
Pancarta de las organizaciones LGBT+ argentinas para visibilizar a las personas LGBT+ desaparecidas durante la última dictadura.
Prostitución trans en Salta (2016). La posibilidad que abrió la biotecnología de producir cambios permanente en los cuerpos y la paralela transfobia social, excluyó a las travestis y transexuales del mercado laboral asalariado forzándolas a trabajar como prostitutas.
Manifestación del "Día de la Dignidad Homosexual" en
Parque Centenario
, llevada a cabo en conmemoración a los disturbios de Stonewall el 28 de junio de 1986.
Pancarta en la Marcha del Orgullo de Buenos Aires en 2022, con el lema «Marcho por
Tehuel
, por nosotrxs y lo más importante, por lxs que vienen»
El presidente Alberto Fernández, rodeado de funcionarios y personas no binarias formando la "X", en alusión a la nomenclatura utilizada para el
DNI
para personas no binarias en el acto de presentación realizado en Casa Rosada en 2021