Luis Buñuel

También participó en las tertulias ultraístas y, todos los sábados desde 1918 hasta 1924, en las del Café Pombo, dirigidas por Ramón Gómez de la Serna.

En 1921 visitó por primera vez Toledo, ciudad que causó una profunda impresión en Buñuel y sus amigos.

Desde 1922 escribe poemas, prosas poéticas y cuentos en diversas revistas literarias de la época, fundamentalmente aquellas que sirvieron de vehículo para el ultraísmo y la generación del 27, como Vltra, Horizonte, Alfar, Helix o La Gaceta Literaria.

Esta se inspiraría en ocho cuentos del escritor, que quedarían unidos a través de diferentes noticias publicadas en un periódico leído por el protagonista.

[15]​ En 1923 murió su padre en Zaragoza, inició el servicio militar y publicó su primer artículo, al que siguieron cuentos y poemas en revistas de vanguardia e incluso preparó un libro que los recopilaba bajo el título, Un perro andaluz.

Para ser caballero había que emborracharse y estar toda la noche sin dormir.

En la capital francesa asistió a las tertulias de los inmigrantes españoles y se acerca cada vez más al grupo surrealista.

Su afición por el cine se intensificó y veía habitualmente tres películas al día, una por la mañana (generalmente proyecciones privadas, gracias a un pase de prensa), otra por la tarde en un cine de barrio y otra por la noche.

Su conversión total al cine se produjo tras ver la película Las tres luces (Der müde Tod), de Fritz Lang.

También en estos años colaboró como actor en pequeños papeles, como el de contrabandista en la película Carmen (Jacques Feyder, 1926) con Raquel Meller, y en La sirène des tropiques (Henri Étiévant y Mario Nalpas, 1927) con Joséphine Baker.

Es conocida su ruptura con este al negarse el aragonés a trabajar en el nuevo proyecto del más reputado de los directores vanguardistas franceses, Abel Gance, de cuyo Napoleón había escrito Buñuel recientemente una crítica muy dura.

Allí, Buñuel forjó amistad con Max Ernst, André Breton, Paul Éluard, Tristan Tzara, Yves Tanguy, Magritte y Louis Aragon, entre otros.

Contratado por la Paramount, regresó a España y trabajó como responsable de sincronización.

En abril de 1933,[19]​ financiado por su amigo Ramón Acín, comenzó a filmar Las Hurdes, tierra sin pan, un documental sobre esa comarca extremeña.

Ese mismo año firmó un manifiesto contra Hitler con Federico García Lorca, Rafael Alberti, Sender, Ugarte y Vallejo.

La pareja tendría dos hijos, Jean Louis, nacido en París, y Rafael, que lo haría en Nueva York.

Así como Dalí se alineó con Franco y simpatizó con el bando sublevado, Buñuel siempre permaneció fiel a la Segunda República.

Supervisó y escribió junto a Pierre Unik el documental España leal en armas.

Su misión era seleccionar películas de propaganda antinazi; tenía despacho propio y personal a su cargo.

Buñuel se reunió con Dalí en Nueva York para pedirle explicaciones y esa entrevista significó la ruptura de sus relaciones.

Truncado el proyecto, Luis Buñuel tuvo la suerte de que Dancigers le ofreciera otro trabajo en 1946: dirigir Gran Casino, una película con el cantante mexicano Jorge Negrete y la argentina Libertad Lamarque, con la que marcó su entrada a la Época de Oro del cine mexicano.

Esta primera película de su nueva etapa constituyó un rotundo fracaso[20]​ y durante los tres siguientes años se vio obligado a mantenerse del dinero que le enviaba su madre todos los meses.

En 1951 filmó Susana y Él ; esta última constituyó un fracaso comercial pero sería valorada en los años siguientes.

El mismo año, rodó Los ambiciosos, cine de compromiso político y social.

En 1964, filmó su último proyecto en México, el largometraje Simón del desierto, que no acabó siendo película por falta de presupuesto.

El mismo año, visitó Los Ángeles, donde vivía su hijo Rafael, y George Cukor ofreció en su casa una cena en honor de Buñuel a la que asistieron, además de su hijo Rafael y Carrière, importantes cineastas como Alfred Hitchcock, Billy Wilder, John Ford, G. Stevens, William Wyler, R. Mulligan, Robert Wise o Rouben Mamoulian.

En 1977, Buñuel puso el colofón a su obra con Ese oscuro objeto del deseo (Cet Obscur Objet du Désir), coproducción hispano-francesa parcialmente rodada en España, que recibió el premio especial del Festival de Cine de San Sebastián.

Su cuerpo fue cremado, y en 1997, sus cenizas fueron esparcidas en el monte Tolocha, situado en su pueblo natal, Calanda.

[33]​ Los textos más significativos son:[34]​[35]​ Los diez poemas del libro inédito, que inicialmente se iba a titular Polismos, fueron escritos hacia 1927.

En ella escribió varios artículos, aunque también publicó en revistas francesas, como Cahiers d'Art o su suplemento Feuilles Volantes.

Benjamín Jarnés , Huberto Pérez de la Ossa , Luis Buñuel (arriba, de izquierda a derecha), Rafael Barradas y Federico García Lorca (abajo) en Madrid en 1923.
Simone Mareuil en un fotograma de Un chien andalou (1929).
Silvia Pinal en una fotografía publicitaria para Viridiana (1961).
( i. a d. ): Jacqueline Andere , Silvia Pinal , y Enrique García Álvarez , en una imagen publicitaria para El ángel exterminador (1962).
Cabeza de Luis Buñuel, obra del escultor Ignacio Rodríguez Ruiz "Iñaki", en el Centro Buñuel Calanda.