Fueron también las primeras elecciones libres que se celebraban tras la dictadura de Francisco Franco.
La otra gran sorpresa de la jornada fue el Partido Socialista Obrero Español que, liderado por el joven abogado Felipe González desde 1974, logró obtener un gran triunfo y obtuvo la segunda posición con casi 120 escaños, convirtiéndose además en el primer y principal partido de la oposición.
Con ello, Fraga y AP quedaron a mucha distancia de la UCD, sin lograr capitalizar el voto conservador.
Estas y otras artimañas explican por qué las Cortes franquistas decidieron «suicidarse».
[10][11] A continuación el gobierno convocó un referéndum popular para el día 15 de diciembre, aunque sin dar ninguna oportunidad a la oposición para que pudiera exponer su postura, la abstención, en los medios de comunicación que controlaba, televisión y radio, y desplegó una formidable campaña a favor del "Sí", por lo que el resultado del referéndum no deparó ninguna sorpresa: hubo una alta participación y el "Sí" ganó abrumadoramente con el 94,2 % de los votos.
[7][12][13] La Reforma política, e implícitamente la Monarquía y el gobierno Suárez, quedaban así legitimados por el voto popular.
También se legalizaron nuevas formaciones políticas, como la Alianza Popular liderada por el exministro Manuel Fraga.
Sin embargo, el Partido Comunista de España continuaba siendo una formación ilegal, lo que constituía un escollo en los planes del gobierno Suárez.
La hostilidad de ciertos mandos militares hizo que el Gobierno y la oposición fueran prudentes al negociar la ley electoral.
El fracaso del PCE causó un fuerte impacto, ya que no se preveía que sacara un resultado tan bajo, y de hecho los resultados no se correspondían ni con su organización ni con su papel durante la Dictadura franquista.
El antiguo jerarca franquista Raimundo Fernández-Cuesta lideró la Alianza Nacional 18 de Julio formada por varios grupos y partidos ultraderechistas, pero con 67.336 votos (0,37%) tampoco consiguió obtener representación parlamentaria.
El histórico Partido Carlista liderado Carlos Hugo tampoco pudo concurrir a los comicios por no estar autorizado, aunque también fue legalizado meses después.
Los senadores por designación real fueron: Pese a que la mayoría se adscribió a los Grupos Parlamentarios Mixto (9), Independiente (10) y la Agrupación Independiente (11), 7 de ellos se adhirieron al grupo de UCD (Fernando Abril Martorell, Luis de Angulo, Torcuato Fernández-Miranda, Ignacio García López, Landelino Lavilla, Rodolfo Martín Villa, Marcelino Oreja), 1 a Entesa dels Catalans (Maurici Serrahima) y 1 al Grupo Vasco (Juan Ignacio de Uría).
[33][34] Se organizaron de acuerdo al régimen electoral preconstitucional y han sido las últimas elecciones parciales que se han convocado pues la ley electoral actual no las contempla al ser un sistema de listas cerradas.