Presentaron como candidatos, en cuatro circunscripciones electorales, a doce personajes de prestigio social o intelectual.
Entre ellos se encontraban Francesc Candel, Pere Portabella o Josep Benet.
Los ocho restantes eran independientes, pero próximos a los socialistas catalanes o al PSUC.
Los doce candidatos resultaron elegidos,[1] formando un grupo parlamentario propio, al que también se unieron los senadores restantes elegidos por Barcelona (Lluís Maria Xirinacs) y Gerona y Lérida (dos senadores elegidos en la lista de Democràcia i Catalunya pertenecientes a Convergència Democràtica de Catalunya), así como Maurici Serrahima, senador por designación real.
El grupo parlamentario Entesa dels Catalans incluía, al iniciarse la legislatura, a dieciséis senadores.