Federación Catalana del PSOE

La posterior represión dejó al partido desorganizado; pero surgió un nuevo impulso, a finales del año siguiente (1910) con el nombramiento de Josep Recasens como secretario general.Ello supuso la desaparición del PSOE en Cataluña como fuerza política propia, cayendo bajo la órbita comunista buena parte de su antigua militancia.Durante el régimen franquista, el PSOE se reconstruyó en la clandestinidad en Cataluña, manteniendo relaciones con el Moviment Socialista de Catalunya.La coalición Socialistes de Catalunya fue el primer paso para la unificación del socialismo catalán que culminó un año después.La Federación llegó a publicar tres semanarios portavoces: El Obrero, La Internacional y La Justicia Social.