Teatro europeo en la Segunda Guerra Mundial

La Revolución de Noviembre significó el cambio del sistema político vigente en Alemania hasta entonces, y la hiperinflación ocasionó que la clase media alemana virtualmente desapareciera.

Hitler llegaría al poder en 1933, e iniciaría los cambios que había prometido, ocupando en primer lugar, los territorios de la Renania.

En este punto, Chamberlain se convenció de que Hitler no pensaba cumplir la promesa hecha en Múnich, y tardíamente los Aliados empezaron a prepararse para otra guerra.

Stalin, preocupado todavía por una muy posible guerra con Alemania, procedió a acelerar la organización de las fuerzas armadas soviéticas, y enfocó su mirada en las fronteras occidentales.

Esta vez los exhaustos defensores fineses fueron sobrepasados y Finlandia tuvo que ceder gran parte de su territorio a la Unión Soviética.

Con la Unión Soviética calmada, Hitler dirigió su mirada entonces hacia el oeste, pero no se atrevía a abrir aquel frente de guerra.

Los británicos decidieron actuar entonces, ya que desde Noruega la Luftwaffe podría lanzar ataques contra el norte de Reino Unido.

Se trazaron varios planes, pero sería el general Erich von Manstein quien encontraría el punto débil de las líneas defensivas francesas.

Mientras tanto, otra importante fuerza alemana al mando del general Gerd von Rundstedt cruzó las Ardenas, congestionándose los tanques en las estrechas carreteras.

Cuando salieron del bosque dos días después, los Aliados se dieron cuenta de que iban a ser rodeados, y el gobierno francés entró en pánico.

Mussolini decidió finalmente actuar, y el 5 de junio le declaró la guerra a los Aliados, e intentó invadir Francia desde el sur.

Durante la batalla, con tantas derrotas en su gobierno, Chamberlain renunció, y fue sucedido por Winston Churchill como primer ministro del Reino Unido.

La RAF aprovechó el cambio de estrategia para incrementar sus efectivos, y finalmente pudieron hacer frente a la Luftwaffe.

Alemania intervino para evitar que el Mediterráneo fuera controlado por los Aliados, abriendo el camino a un desembarco por el sur de Europa.

Después de varios intentos, los británicos finalmente lograron hacer retroceder a Rommel, que había agotado sus reservas.

Mussolini había presionado al primer ministro de Grecia, Ioannis Metaxas, a que cediera ante unas exigencias italianas.

Stalin confiaba en que Hitler respetaría el pacto por lo menos hasta 1945, y planeaba tener su ejército listo para esa época.

A última hora, Hitler decidió tomar ambos objetivos al mismo tiempo, dividiendo las fuerzas destinadas inicialmente para uno solo.

Hitler vio este saliente como la oportunidad perfecta para retomar la iniciativa y destruir a tres frentes (grupos de ejércitos) soviéticos al mismo tiempo.

En su lugar, fue nombrado primer ministro el mariscal Pietro Badoglio, quien inmediatamente anunció que Italia continuaría en la guerra, aunque inició en secreto negociaciones con los Aliados.

Después de sufrir fuertes bajas en Salerno, los ejércitos aliados iniciaron su ascenso por Italia, denominada el «suave vientre del Reich» por Winston Churchill.

En la batalla del Dnieper, los alemanes intentaron en vano contener a un enemigo numeroso y mejor equipado, sufriendo fuertes bajas.

La línea Panther-Wotan fue quebrada al sur de las marismas del Pripet, y el 1º ejército Panzer casi quedó atrapado en su totalidad.

Para finales de aquel mes, del territorio soviético, solamente Bielorrusia y los estados bálticos continuaban ocupadas por Alemania.

Esta ofensiva se detuvo en la Panther-Wotan, que correspondía, con poca exactitud, a la actual frontera de Estonia con Rusia.

El Ejército Rojo tenía ante sí el llano polaco, y solamente debía cruzar el río Vístula para apoderarse de Polonia.

El 25 de agosto, las fuerzas del general Jacques Leclerc entraron en París, que había sido declarada ciudad abierta por el enemigo.

Deseoso por terminar la guerra rápidamente, el general Bernard Montgomery elaboró la operación Market Garden, que implicaba la captura de varios puentes estratégicos en los Países Bajos, desde donde pensaba entrar en Alemania, superando el río Rin.

La sorpresa estadounidense y el mal tiempo, que mantuvo a los aviones aliados en tierra, fueron las principales causas del inicial éxito alemán.

En el sur, la Batalla de Budapest tuvo un final sangriento cuando las desesperadas tropas alemanas, completamente rodeadas, se lanzaron en una carga suicida contra los soviéticos.

Pila de soldados soviéticos muertos en Finlandia
Los soldados británicos utilizan botes pesqueros para escapar de Dunkerque .
Hitler y varios oficiales alemanes minutos antes de firmar el Armisticio con Francia
El general Rommel conversa con sus oficiales durante la campaña de África del Norte.
Winston Churchill predijo acertadamente que el Pacto Germano-Soviético no duraría mucho. En la imagen, oficiales alemanes y soviéticos se saludan en Polonia en 1939.
Soldados aliados desembarcan en Salerno
Situación en Europa central a mediados de febrero de 1945.
El mayor general Maurice Rose (aquí en la ceremonia de recepción de la Croix de Guerre en marzo de 1945) fue el oficial estadounidense de mayor rango en perder su vida en el teatro europeo, escasas semanas antes del fin de la guerra en Europa .