Una vez creado un corredor para las tropas, el Primer Ejército podía avanzar hacia Bretaña, rebasando los flancos alemanes y liberándose de las limitaciones impuestas por el bocage del terreno normando.
Tras un comienzo lento, la ofensiva cobró ímpetu, y la resistencia alemana colapsó, con los sobrevivientes luchando a medida que escapaban en forma desorganizada hacia el río Sena.
La Operación Cobra, junto a otras operaciones simultáneas llevadas a cabo por el Segundo Ejército británico y el Primer Ejército canadiense, fue decisiva para asegurar la victoria aliada en la campaña de Normandía.
Unidades del VII Cuerpo lideraron el asalto inicial de dos divisiones mientras que los demás cuerpos del Primer Ejército montaron ataques de apoyo diseñados para inmovilizar a las tropas alemanas.
El progreso fue lento durante el primer día, pero la oposición comenzó a derrumbarse una vez que la coraza defensiva fue destruida.
Las fuerzas alemanas se vieron detenidas por la resistencia estadounidense y el acoso de los cazabombarderos aliados.
[3] El plan original para la campaña de Normandía preveía grandes esfuerzos ofensivos en ambos sectores, en los cuales el Segundo Ejército del Reino Unido, bajo el mando del teniente general sir Miles Dempsey, tomaría control de Caen y el área al sur de este,[4] y el Primer Ejército daría "una vuelta" hacia el Loira.
[6] El Segundo Ejército debía tomar Caen y luego movilizarse hacia el sureste, extendiéndose hasta Caumont- l'Éventé, para tomar las pistas aéreas y proteger el flanco este del Primer Ejército mientras este se dirigía a Cherburgo.
[7] El tener el control de Caen y sus alrededores -deseable por su terreno abierto que permitiría maniobras bélicas-[8] también daría al Segundo Ejército un área temporal para organizarse para un asalto al sur para capturar Falaise, que podía ser usado como pivote para un avance hacia la derecha sobre Argentan y luego hacia el río Touques.
[21] Aun no está claro quién tuvo la idea original de la Operación Cobra.
[28] Durante la reunión, Bradley admitió que el progreso del flanco occidental era muy lento.
[31][32][33][34][35][36] Presentó sus ideas a Montgomery,[29] quien las aprobó, y la directiva que salió de la reunión dejó en claro que la estrategia general en los siguientes días sería la de mantener la atención del enemigo lejos del Primer Ejército y dirigirla al sector británico y canadiense;[17] Dempsey recibió sus instrucciones: "continúa golpeando, atrayendo a las fuerzas alemanas, especialmente las unidades de tanques, hacia ti, para hacer más fácil el camino para Bradley".
[17] El 12 de julio, Bradley informó a sus comandantes sobre el Plan Cobra, el cual consistía en tres fases.
[39] Si los esfuerzos del VII Cuerpo tenían éxito, la posición occidental alemana se podía volver inestable, permitiendo así un avance relativamente fácil hacia el extremo suroeste del bocage para separar y capturar la península de Bretaña.
[38] Mientras que los tanques alemanes se seguían viendo restringidos a los caminos, los blindados estadounidenses ahora podían maniobrar más libremente,[38] aunque en la práctica estas modificaciones no eran tan efectivas como comúnmente se creía.
[61] Al mismo tiempo, el II Cuerpo canadiense en el flanco oeste de Goodwood lanzó la Operación Atlantic.
[63] Habiéndole costado 1349 hombres a los canadienses y con las fuertemente defendidas colinas en manos alemanas, Atlantic fue cancelada el 20 de julio.
Sin embargo, a petición de Montgomery, "claramente resaltada en las comunicaciones del Comando Supremo a Montgomery", el comandante del II Cuerpo canadiense, el teniente general Guy Simonds, lanzó una segunda ofensiva pocos días después, llamada Operación Spring.
[66] Solo quedaron dos divisiones Panzer con 190 tanques para enfrentarse al Primer Ejército de Bradley.
[45] Sin embargo, nuevamente no todas las bajas fueron alemanas: Bradley había solicitado específicamente que los bombarderos llegaran a su objetivo desde el este, fuera del sol y paralelos al camino entre Saint-Lô y Périers para minimizar el riesgo de pérdidas por fuego amigo, pero gran parte de los pilotos llegaron desde el norte, en dirección perpendicular a la línea del frente.
[77] El VII Cuerpo pudo ganar tan solo 2200 m durante el resto del día.
[76] Sin embargo, si el primer día el resultado había sido desalentador, el general Collins encontró razones para sentirse motivado: aunque los alemanes estaban aferrándose ferozmente a sus posiciones, estas no parecían formar una línea continua y eran susceptibles de ser sobrepasadas por los flancos o ser rebasadas.
[78] Ese mismo día, el VIII Cuerpo del mayor general Troy H. Middleton entró en la batalla, liderado por las 8.ª y 90.ª Divisiones de Infantería.
[79] Pese a que había caminos claros para avanzar a través de los pantanos y partes inundadas en su frente, ambas divisiones decepcionaron al Primer Ejército al no poder ganar terreno significativo inicialmente,[79] pero a la primera luz del día siguiente se dieron cuenta de que los alemanes se habían visto obligados a replegarse por su flanco izquierdo, dejando solo inmensos campos minados tras de ellos para retrasar el avance del VIII Cuerpo.
[82] Sin recibir apoyo directo por parte de la 2.ª División Panzer como se le prometió, Guderian informó que sus panzergrenadiers no pudieron contraatacar efectivamente a los estadounidenses.
[82] Para entonces el avance estadounidense era imparable, y el Primer Ejército finalmente había pasado el bocage.
UU.[85] Patton escribió un poema que decía: El avance estadounidense después de la Operación Cobra fue extraordinariamente rápido.
[98] Todas las fuerzas alemanas al oeste de las líneas aliadas ahora se encontraban muertas o habían sido capturadas[99] y pese a que probablemente unos 100 000 soldados alemanes lograron escapar, dejaron atrás a 40 000-50 000 prisioneros y más de 10 000 muertos.