La cobertura aérea fue esporádica durante gran parte de la operación, ya que el mal tiempo en el Reino Unido obligó a la cancelación del apoyo aéreo en el último minuto.
En los intensos combates de los dos días siguientes, se obtuvo un punto de apoyo a través del río Odón y se hicieron esfuerzos para ampliar dicho punto mediante la captura de puntos estratégicos en todo el saliente y movilizando a la 43.º División de Infantería (Wessex).
Aunque los alemanes habían logrado contener la ofensiva, para ello se habían visto obligados a dedicar todas sus fuerzas, incluyendo dos divisiones panzer recién llegadas a Normandía y destinadas a una ofensiva contra las posiciones británicas y estadounidenses en torno a Bayeux.
Las bajas fueron severas en ambos bandos pero a diferencia del general Bernard Montgomery, el mariscal de campo Erwin Rommel no pudo retirar a sus unidades a la reserva después de la batalla, ya que fueron necesarias para mantener la línea del frente.
Los británicos conservaron la iniciativa y fueron capaces de lanzar más operaciones en las semanas siguientes, y eventualmente capturar Caen hacia el final de julio.