Mannerheim nació en la mansión Louhisaari, en Askainen, en el seno de una familia sueco-finesa, con antepasados neerlandeses, que había ascendido a la nobleza en 1768.Sus padres fueron el conde Carl Robert Mannerheim y su esposa Hedvig Charlotta Hélène von Julin, siendo el tercer hijo de este matrimonio, una familia en la que los hijos menores heredaban el título de Barón (en finés Vapaaherra, en sueco Friherre).Curiosamente, Mannerheim no aprendió a hablar finés hasta los 50 años de edad aproximadamente.Su hijo, Augustin Marhein, fue distinguido como noble en 1693, y su apellido se convirtió finalmente en Mannerheim.El padre de Mannerheim, el conde Carl Robert (1835-1914), era poeta, escritor y empresario.La mansión Louhisaari fue vendida en 1880 para cubrir las deudas del conde Carl Robert, y al año siguiente su esposa falleció, dejando a sus hijos bajo el cuidado de sus parientes.Su familia arregló su matrimonio con Anastasia Arápova, hija de un general ruso, por motivos económicos.Luchó en la guerra ruso-japonesa, siendo ascendido a coronel por su valentía en la batalla de Mukden.En la Primera Guerra Mundial, Mannerheim sirvió como jefe de caballería en los frentes rumano y austrohúngaro.Después de que Federico Carlos de Hesse-Kassel fuera señalado como pretendiente, despertando así las suspicacias en los Aliados, su posterior renuncia al trono permitió a Mannerheim asegurar el reconocimiento de la independencia finlandesa por parte del Reino Unido y los Estados Unidos, solicitando y recibiendo ayuda alimenticia extranjera para combatir el hambre existente tras el conflicto civil.Asistido en las decisiones estratégicas por el teniente general Aksel Airo, Mannerheim estableció su cuartel general en Mikkeli, donde permaneció gran parte del tiempo en que se desarrollaron la Guerra de Invierno y la Guerra de Continuación, si bien hizo numerosas visitas al frente.Ese mismo día recibió la inesperada y no tan agradable visita de Adolf Hitler para felicitarle por el doble acontecimiento, lo cual le causó cierta zozobra.Otro factor era el desagrado que le causaban los alemanes, habiéndose mostrado siempre contrario a su influencia en los asuntos políticos y militares de Finlandia.Desde el aeropuerto, y acompañado por el presidente Ryti, Hitler fue conducido hasta Mannerheim, quien le aguardaba en la vía muerta del tren.Es por tanto necesario analizar la figura de Mannerheim desde dos perspectivas: la militar y la política.Mannerheim se abrumó con el trabajo, y en consecuencia la coordinación entre los diversos departamentos en los cuarteles generales se vio afectada negativamente, algo que pudo influir en que la ofensiva soviética en el istmo de Karelia en junio de 1944 cogiese desprevenidos a los finlandeses.No existía otra autoridad salvo Mannerheim que recabara toda la información y la volcase en órdenes operacionales.Mannerheim fue pues cauto en este aspecto, para ir tomando gradualmente el liderazgo del país y conducirlo a la paz.Mannerheim desempeñó este papel de forma muy hábil, ya que tenía una clara visión sobre cómo Finlandia debía conducir su guerra en la delicada situación del momento, cuando el final de la contienda permanecía aún incierto.Sin embargo en junio de 1944, debido a la amenaza que suponía una inminente ofensiva soviética sobre el frente finlandés, Mannerheim creyó necesario que Finlandia accediese a firmar el pacto de alianza que demandaba el ministro de Asuntos Exteriores alemán, Joachim von Ribbentrop, para poder así asegurar la ayuda militar alemana.Mannerheim fue entonces elegido presidente el 4 de agosto, principalmente porque era la única figura con el suficiente prestigio tanto internacional como nacional para ocupar el cargo en ese momento.Fue sustituido en el cargo por su primer ministro, Juho Kusti Paasikivi, conservador aunque de tendencia rusófila.