Anexo:Aves extintas

Desde el principio de la Edad Antigua, la expansión del hombre y otros animales asociados a la colonización humana, como pueden ser perros, gatos o ratas, han alterado los ecosistemas naturales en prácticamente todo el planeta.

Otras en cambio, no tienen una causa clara; si bien es cierto que muchas especies se han extinguido incluso antes de que los científicos pudieran al menos describirlas y solamente conocemos su pasada existencia por restos subfósiles o incluso por relatos de exploradores y nativos.

Las especies de este orden extinguidas en época histórica son:[nota 1]​ Las aves del orden Anseriformes, que comprenden básicamente las anátidas y los chajás, son en algunos casos muy sensibles a la caza y a la alteración de los humedales.

La caza y la alteración del hábitat también han contribuido al declive de muchas especies.

Las especies de este orden extinguidas en época histórica son:[nota 4]​ Nota: el zarapito del Ártico (Numenius borealis) fue diezmado por la caza intensiva y fue registrada por última vez en Barbados, en 1963, aunque recientes observaciones de aves similares en Nueva Escocia podrían referirse a la supervivencia de esta especie.

Las aves del orden Gruiformes, conocidas comúnmente como zancudas, son muy vulnerables a la introducción de nuevos depredadores en sus hábitats, ya que muchas son de hábitos terrestres.

Son vulnerables a la caza y los cambios en el hábitat, sobre todo para las especies insulares.

La cotorra de Sinú (Pyrrhura subandina) ha sido reconocida como nueva especie recientemente, y aunque no existen registros fiables desde 1940, faltan estudios que clarifiquen cuál es su estatus actual.

En cuanto al loro ecléctico de Oceanía (Eclectus infectus), que habitó varias islas melanesias durante el Neolítico, podría haber subsistido en Tonga hasta el siglo XVIII, pero faltan pruebas concluyentes.

Las aves de este orden se conocen comúnmente como chotacabras y suelen tener hábitos nocturnos.

El dodo ( Raphus cucullatus ) es, posiblemente, el ave extinta más conocida.
Una ilustración que muestra un emú de la isla King (derecha) y un emú de la isla Canguro (izquierda).
Un ejemplar disecado de pato del Labrador ( Camptorhynchus labradorius ).
Ilustración de dos codornices de Nueva Zelanda ( Coturnix novaezelandiae ).
Tympanuchus cupido cupido , se extinguió en 1932 debido a la caza excesiva
Una alca gigante ( Pinguinus impennis ) disecada, conservada en el Museo de Historia Natural de Londres .
El rascón de Laysan ( Porzana palmeri ) es una de las muchas especies de rascón extinguidas en los últimos siglos.
El calamón de Lord Howe ( Porphyrio albus ) fue exterminado por la caza a principios del siglo XIX .
Modelo de un somormujo de Alaotra ( Tachybaptus rufolavatus ).
Dibujo de un ibis de Reunión ( Threskiornis solitarius ).
Dibujo de un cormorán brillante o de Pallas ( Phalacrocorax perspicillatus ).
La paloma migradora ( Ectopistes migratorius ), antaño muy abundante, sufrió cacerías a gran escala que la llevaron a extinguise en 1914.
Un ejemplar disecado de cotorra de Carolina ( Conuropsis carolinensis ).
Un cuco de Delalande ( Coua delalandei ) disecado.
Un águila de Haast ( Harpagornis moorei ) atacando un grupo de moas .
El mochuelo reidor ( Sceloglaux albifacies ) habitaba Nueva Zelanda .
Ejemplares disecados de carpintero imperial ( Campephilus imperialis ).
El acantisita de Isla Stephen ( Xenicus lyalli ) se considera el ave no voladora de menor tamaño conocida.
La huia ( Heteralocha acutirostris ) presentaba diferencias en el pico según su sexo.