[12] La primera misión encomendada a los foederati visigodos fue acabar con las «monarquías militares» establecidas en Hispania por alanos y vándalos silingos.[33][34][39] El paso del estrecho duró cerca de un mes y se utilizó una flotilla formada por unas quinientas embarcaciones.«Por ese tratado, análogo a los que Roma había concluido antes con ciertas tribus bereberes, el poder imperial pensaba haber salvado lo esencial: Cartago, el África proconsular y la Bizacena, la metrópoli y la tierras más ricas de trigo de África», ha afirmado Pierre Cosme.[59][60][61] Al contar únicamente con sus propias fuerzas a Valentiniano III no le quedó más remedio que negociar con Genserico.También los obispos y monjes huyeron a causa de la política abiertamente hostil hacia los «católicos» emprendida por el arriano Genserico.Llegó a Ostia al final del mes de mayo, desembarcando un imponente cuerpo militar formado por vándalos y por mauri.El mismo Petronio Máximo emprendió la huida a caballo, pero fue reconocido y lapidado por la multitud —su cadáver, descuartizado, fue lanzado al Tíber—.[82] Como escribió Próspero de Aquitania, «durante catorce días, los vándalos saquearon Roma, buscando con cuidado todas las riquezas».Se ha debatido si Genserico fue llamado por la emperatriz Eudoxia, viuda de Valentiniano III obligada a casarse con el usurpador Petronio Máximo, como afirmaron algunos autores antiguos, en especial Procopio.David Álvarez Fernández considera «que la culpabilidad otorgada en las fuentes a Eudoxia no es una historia baladí y bien puede tener una sólida sombra de verdad.[152][153] Por razones estratégicas como punto más cercano al reino vándalo, Genserico se reservó Lilibeo en el extremo occidental de la isla.La Cuarta Guerra Púnica había finalizado y esta vez con un resultado favorable para el poder que se oponía a Roma», ha afirmado David Álvarez Jiménez.[158] Probablemente también fue el primero en sentarse en un trono, vestir la púrpura y portar diadema, como hicieron todos sus sucesores.Se basan en el autor vándalo Draconcio quien en el poema dedicado a Guntamundo Satisfactio[165] dice que Dios había favorecido al rey vándalo con triunfos por tierra y por mar como muy bien podía atestiguar Ansila («Te Deus aspiciens effundere nolle cruorem, ut sine peccato, non sine laude daret, contulit terrae pelagique triumphos: Ansila testatur, Maurus ubique iacet»).Asimismo ordenó construir fortalezas costeras en diversos lugares y más tarde una flota de mil dromones que tenía como fin asegurar, según Casiodoro, el «grano público» (frumenta publica) frente a las «naves enemigas» (adversis navibus), si bien en este plano el reino vándalo les llevaba a los ostrogodos una ventaja inalcanzable.Guntamundo nada más acceder al trono lo había alejado de Cartago para impedir que pudiera reclamar sus derechos sucesorios como hijo del Hunerico y Hilderico se había exiliado en Constantinopla donde fue muy bien acogido, ya que estaba emparentado con la dinastía teodosiana, al ser su madre, Eudocia hija de Valentiniano III.Para dirigir la operación nombró a su mejor general, Belisario, quien en su preparación siempre tuvo muy presente la fracasada expedición de cincuenta años antes.[181] Tras conocer esta buena noticia Belisario mandó que la flota se dirigiera a Caput Vada, actual Chebba (Túnez), situada en la costa vándala al sur de Cartago.Sin embargo, en la actualidad tiende a interpretarse de una forma completamente diferente, como es el caso del historiador español David Álvarez Jiménez .[191][nota 10] Sin embargo, entre los historiadores actuales existe un consenso muy amplio en calificar las actividades marítimas vándalas como actos de piratería.Además estas embarcaciones mercantes les proporcionaba un camuflaje, ya que solo desvelaban sus intenciones cuando se acercaban a sus objetivos e izaban las enseñas vándalas con forma de dragón (dracones).En los desembarcos no sólo participaban vándalos, sino también mauri e incluso, probablemente, africanorromanos, especialmente en las tareas de navegación.La unidad de los vándalos era más bien política que cultural, ya que a los lejanos herederos de los Vandili —nombre dado por las fuentes latinas al pueblo asentado en el sur de la actual Polonia desde el siglo I a. C.— se les habían ido uniendo otros pueblos durante su desplazamiento hacia la Europa central en los siglos II y III y hacia el Rin a finales del siglo IV.Genserico decidió por ello concentrar a su pueblo en una única provincia, el Africa proconsular, donde se encontraba Cartago.[198] Genserico dejó casi intacta la organización económica y social existente, lo que facilitó enormemente la adhesión de los romanos al nuevo poder vándalo.Fue así como, pasado el choque de la conquista, nació progresivamente «un reino mucho más romano que “bárbaro”», ha indicado Yves Modéran.Guntamundo seguiría esta misma política, aunque atenuada, y su sucesor Trasamundo se propuso formar una verdadera iglesia «nacional» arriana.Como Fulgencio no abandonó su activismo antiarriano —su crítica al arrianismo fue recopilada en su tratado Contra Arianos— Trasamundo lo envió de vuelta a Cerdeña en 518, donde fundó un monasterio con scriptorium.Muchas fueron restauradas, otras perfectamente mantenidas, como las de Thuburbo Maius o Bulla Regia, y también se edificaron algunas nuevas.[208] Otros documentos también atestiguan que los vándalos, o al menos la élite establecida en Cartago, adoptaron el estilo de vida romano.
Mosaico de un pavimento de Bordj Djedid cerca de Cartago (en la actualidad en el
Museo Británico
) que representa a un guerrero vándalo a caballo.
Migración del pueblo vándalo desde el
Barbaricum
hasta el
África romana
, que conquistaron en solo diez años (429-439). Este mapa sigue la teoría tradicional que sitúa el origen de los vándalos en Escandinavia y no en la
Cultura de Przeworsk
(actual Polonia).
Cabo Bon
, en la costa de Túnez, donde tuvo lugar la
batalla que lleva su nombre en 468
en la que los vándalos vencieron, lo que puso fin a la posibilidad de recuperar el norte de África para el Imperio romano.
Moneda de oro con la efigie del emperador bizantino
Zenón
quien acordó con
Genserico
el tratado de la «paz perpetua» de 474, que consolidó definitivamente el reino vándalo.
Moneda de plata de 50 denarios de
Hilderico
en cuyo reverso aparece la iconografía FELIX KARTHAGO, que rompía con la tradición vándala, ya que se propuso ser el rey de todos los «africanos» y no sólo de la élite vándalo-alana que gobernaba el reino.
El reino vándalo poco antes de la deposición de
Hilderico
y su sustitución por
Gelimer
.
Plan de ataque de Gelimer en la
batalla de Ad Decimum
, que finalmente se saldaría con el triunfo del ejército bizantino comandado por
Belisario
.
Cuadro del pintor ruso del siglo
XIX
Karl Briulov
sobre el
saqueo de Roma por los vándalos
en el que se aprecia la visión tradicional que ha prevalecido sobre los vándalos y sobre los «
bárbaros
» en general, movidos por un insaciable afán de botín. A la izquierda aparece a caballo el rey vándalo
Genserico
dirigiendo a sus huestes. A la derecha el obispo de Roma
León I el Magno
contemplando desolado el pillaje.
Mapa de la
diócesis de África
del
Imperio romano
. Los vándalos mantuvieron esta división administrativa para su reino. No introdujeron cambios ni en los límites de las provincias ni en sus nombres.