Algunos autores, basándose en fuentes literarias y epigráficas, sostienen que la ciudad debió llamarse Pompelo.[5] Estaba asentada sobre un amplio altozano, en medio de una feraz cuenca, bordeado por el río Arga.[6] Su posición estratégica, dominando los pasos del Pirineo occidental, explicaría un origen basado en motivos económicos y militares.[10] La arqueología parece confirmar este último punto, ya que se encuentran restos prerromanos e itálicos.Por ello se han realizado prospecciones de urgencia motivadas por obras civiles y urbanas en la zona.