Mauritania Cesariense

En el siglo I, el emperador Claudio dividió el recientemente anexionado reino de Mauritania en dos provincias: Mauritania Tingitana (con capital en Tingis, la actual Tánger) al oeste, y Mauritania Cesariense (con capital en Iol Caesarea, la antigua capital real, actualmente Cherchell, a unos noventa kilómetros al oeste de Argel) al este, fijándose la divisoria en el río Mulucha (Muluya), situado a unos sesenta kilómetros al oeste de Orán.Mauritania Cesariense ocupaba pues el norte del actual territorio argelino, al norte de la cordillera del Atlas, limitando al este con la provincia de Numidia.El primero fue la escisión de su parte más oriental, para formar una nueva provincia, Mauritania Sitifense, con capital en Sitifis, una ciudad interior, con un importante puerto en Saldae (en la actualidad Bugía).El cristianismo se extendió por la zona durante los siglos IV y V. Mauritania Cesariense se convirtió en parte del reino de los vándalos con sede en Cartago, cuando en 430 cruzaron el estrecho de Gibraltar desde Hispania y conquistaron las provincias del África romana.Los territorios bizantinos norteafricanos se integrarían en una nueva prefectura de África, más tarde transformada en el exarcado de Cartago, que fue conquistado por los Omeyas a finales del siglo VII, poniendo fin a la cultura romana cristiana en esta zona.