[2] Sobre el islote se asienta la actual Ciudad de México, que corresponde a la misma ubicación geográfica.
A esta civilización se le han dado varios nombres, el más conocido “aztecas”; ya que en esos tiempos era común que los miembros de la sociedad recibieran un nombre con respecto al lugar dónde vivían ellos comenzaron a autonombrarse “tenochcas” o como los conocemos actualmente y la manera más correcta de llamarlos es “mexicas”.
Esta civilización fue la más conocida y representativa situada en la región centro-sur del actual territorio mexicano, y fueron los fundadores de lo que actualmente se conoce como “Imperio Azteca” el cual colonizó la región central mesoamericana.
Aquí fue donde Tenochtitlán se convirtió en el corazón de la civilización y la capital del imperio, la cual se expandió notoriamente por medio de poblaciones, conocidas en ese momento como “altépetl”, que, unidas entre sí, formaron un Estado imperial donde se impulsó la lengua náhuatl y el culto a los dioses en los que creían, conformadas por campesinos, artesanos, comerciantes, guerreros, sacerdotes y gobernantes hasta la llegada de los españoles.
Esta situación fue aprovechada por los recién llegados en 1519, que rápidamente establecieron alianzas con los zempoaltecas y los tlaxcaltecas.
En la historiografía de Mesoamérica, aparecen los términos nahuas, mexicas y aztecas como vagamente equivalentes.
Entonces, Nezahualcóyotl puede regresar a Texcoco e inicia el largo reinado que no había de terminar sino con su muerte en 1472.
El mito mexica oficial enuncia su origen mítico en Aztlán, una isla originaria de donde partieron por designios divinos.
El Códice Boturini enuncia la ruta oficial hecha por los mexicas, que incluyó sitios de Hidalgo y México; hay más de treinta fuentes que aparentemente señalan particulares itinerarios, estos a través del análisis se reducen a tres principales rutas, por lo que es necesario tomar en cuenta además del Boturini esas otras dos grandes tradiciones.
Según la historia oficial aceptada, en un islote al poniente del lago de Texcoco, fundaron los mexicas México-Tenochtitlan en el año 2 Calli o 1325 en donde se cumplió, según el mito oficial, la profecía de un águila devorando una serpiente sobre un nopal.
Sin embargo, se sospecha que un huey tlatoani, Tízoc, fue envenenado por el consejo, por ser considerado inepto y débil.
En los altépetl más importantes residía además un calpixque o recaudador que centraba su actividad en la tributación.
Tlatelolco originalmente era una ciudad independiente del poder mexica, pero finalmente fue sometida y convertida en un suburbio de Tenochtitlan.
Se sospecha que otro métodos[cita requerida] eran usados para las obras de ingeniería mexicas, como los diques, acueductos, templos, etc.
Esta característica indica que para reducir la carga impositiva los tlacuilos pudieron intencionalmente producir mediciones imprecisas al sistemáticamente registrar valores menores en sus medidas lineales y áreas.
Los glifos centrales se multiplican por el valor 20 (ya que las áreas eran registradas comúnmente en unidades de 20).
[15] Solamente una descripción básica del palacio se encuentra en el mapa o códice Quinatzin.
Sin embargo durante su expansión militar, la tecnología metalúrgica presente en las diversas zonas dominadas empezó a dispersarse en el imperio.
Los dioses estaban integrados de forma variada por esas dos materias y mantenían una comunicación constante con los humanos, los que podían llegar a "alojar" en los cuerpos mundanos de forma intensa (convirtiendo al ser habitado en el dios mismo, como en las fiestas en que sacrificaban a un noble que era habitado por Xipe Tótec) o de forma ligera provocando perversiones o virtudes.
En relación con esto cabe mencionar que las elites política, religiosa y militar practicaban la antropofagia ritual con las víctimas de los sacrificios.
Tras su muerte su corazón se convirtió en el lucero de la mañana, y como tal es vinculado con la divinidad Tlahuizcalpantecuhtli.
Al fracasar en su propósito, emigró hacia el este, prometiendo que un día regresaría en un año determinado de la cuenta mexica.
Captaban la esencia de lo que querían representar y luego realizaban sus obras con todo detalle.
Algunos instrumentos musicales usados son Teponaztli, Tecomapiloa, Omichicahuaztli, Huéhuetl, Coyolli, Chililitli, Chicahuaztli, Cacalachtli, Ayotl, Ayacahtli, Tetzilacatl, Ayoyotes.
Sin ninguna duda los tres astros que a los mexicas les llamaban más la atención son: el sol, la luna y el planeta Venus, por ello dichos astros han provocado grandes creencias y mitos.
Esto se explica ya que eran agrupados pequeños dioses locales para cada cosecha y festejo.
La observación del movimiento de Venus cobró gran importancia en la astronomía y en la cronología indígena.
Setenta y cinco ciclos sinódicos venusinos de 584 días son equivalentes a 104 años solares, este periodo era llamado huehuetiliztli (vejez).
Por otra parte, los ciclos sinódicos venusinos se contaban en grupos de cinco (equivalentes a ocho años solares).
Es por ello que Tlahuizcalpantecuhtli es representado usualmente con el rostro pintado con cinco grandes puntos blancos, dos sobre cada mejilla y uno en la nariz.