Cuando Lerdo de Tejada entró al poder, Chavero partió a Europa.
[4] Como poeta y dramaturgo sus obras alcanzaron considerable éxito en París durante su época, pero pasaron de moda, se les considera acartonadas por lo que no persistieron en el gusto del público.
[5] Fue director del Museo Nacional desde 1903, por el cual se dice que no recibiá remuneración monetaria alguna.
A la muerte del presidente Benito Juárez, pronunció un discurso durante los funerales.
[7] Fue también un bibliófilo, su biblioteca personal fue originada al comprar los libros de José Fernando Ramírez.