El pueblo tlaxcalteca es una comunidad nahua asentada en lo que hoy es el estado de Tlaxcala.
En los siglos XIV y XV, el pueblo totonaca-tlaxcala floreció como un importante señorío integrado por 21 pequeñas ciudades-estado, conocido como República de Tlaxcala.
Además, es uno de los pocos pueblos que el Imperio azteca nunca pudo someter.
[5] Llevaban una existencia primitiva y vivieron en cuevas hasta que otros grupos los obligaron a emigrar.
[18] Debido a la colonización tlaxcalteca, hoy muchas ciudades desde Guatemala hasta Nicaragua tienen topónimos de origen náhuatl.
En el siglo XVII, comenzaron a denominarse "tlaxcaltecas de Ciudad Vieja" o "mexicanos de Ciudad Vieja", y todavía durante el siglo XIX se siguió reconociendo la presencia tlaxcalteca en Guatemala.
[28] Otra localidad neomexicana, Nueva Tlaxcala (hoy Taos),[29] fue nombrada así en honor a los colonizadores.
[30] Se sabe que eran mineros en el Monte Chalchihuitl (al que le pusieron este nombre náhuatl), en la localidad de Los Cerrillos,[31] pues, aunque los españoles no le dieron importancia al mineral que abunda allí (la turquesa), los tlaxcaltecas la apreciaban por encima de cualquier otra piedra.
[37] El legado de los tlaxcaltecas y, en general, de los pueblos nahuas en el archipiélago se puede notar en muchos aspectos, desde su gastronomía (principalmente los tamales)[38] hasta influencias en sus idiomas más hablados,[35] como el filipino y el cebuano,[39] los cuales hoy en día contienen un gran número de palabras provenientes del náhuatl.