El Popocatépetl (español [popokaˈtepetl]ⓘ, náhuatl [popoːkaˈtepeːt͡ɬ]ⓘ) (del náhuatl: Popōcatepētl[a] o Popokatepetl[b] ‘Montaña que humea’), también conocido como don Goyo,[3][4] es un volcán activo localizado en México.
Se encuentra en los límites territoriales del Estado de México, Morelos y Puebla.
Es el segundo volcán más alto de México, solo después del Citlaltépetl, de 5636 m.[1][2] Su nombre, proveniente de la lengua náhuatl, compuesto por popōca «humear» y tepētl «montaña, cerro», en conjunto significa «montaña que humea», debido a su ya constante actividad desde la época prehispánica.
En efecto, a 5000 metros la simetría queda destruida por el pico del Fraile, ligera protuberancia que sobresale del flanco noroeste y es vestigio del Nexpayantla, antiguo estratovolcán, sepultado bajo la alternancia de oleadas de lava y capas de piroclastas que forman el cono actual.
En vista de que la lava puede salir por cualquier fisura que se produzca en sus laderas y no solo por su cráter, es difícil conocer por adelantado cuáles serían las zonas afectadas en caso de erupción.
Lo más que se puede decir es que si la lava saliera del lado norte o noreste, o este y sureste, el estado de Puebla se vería afectada.
[8] Si saliera del lado sur se vería afectado el Estado de México y posiblemente el estado de Morelos, y si saliera del lado oeste y suroeste se vería afectada la región en donde se encuentra la población de Amecameca.
[cita requerida] Sin embargo, conocer todo esto no es suficiente para salvar vidas, ya que aún sabiendo que en una erupción grande que ocurriera por ejemplo en enero, los vientos acarrearían la nube de cenizas y gases hacia el estado de Puebla,[cita requerida] probablemente no habría tiempo suficiente para organizar una evacuación, debido a que en la actualidad no es posible predecir con suficiente antelación cuándo va a ocurrir el fenómeno.
También podría llegar a provocar lluvia ácida en caso de una explosión violenta.
Esta zona es caracterizada por tener una pendiente muy abrupta, lo que genera que se divise una pared de roca en la cual no crece vegetación por las mismas características con las que cuenta y además sea un escenario glaciar, aunque hoy en día los glaciares del volcán se encuentran extintos.
[13] Cuenta la leyenda que en tiempos prehispánicos vivieron Itzaccíhuatl, una princesa tlaxcalteca de gran belleza, y Popocatépetl, un guerrero apuesto y valiente, antes de partir a la guerra en la que los tlaxcaltecas se encontraban inmersos contra sus enemigos acérrimos, los aztecas.
Poco tiempo después, Popocatépetl regresó victorioso de la batalla dispuesto a tomar matrimonio con Iztaccíhuatl; sin embargo, a su llegada recibió la funesta noticia de su fallecimiento.
Durante varios días y noches, cuentan que el joven vagó por las calles hasta encontrar la manera de honrar el gran amor que ambos se profesaban, y fue así como ordenó erigir una gran tumba bajo el sol amontonando 10 cerros para levantar una enorme montaña.
Una vez construida, tomó el cuerpo inerte de su princesa, y recostándola sobre la cima de la montaña, la besó por última vez para después, con una antorcha humeante en mano, arrodillarse para velar su sueño eternamente.
[17] El primer ascenso registrado a este volcán fue hecho los españoles dirigidos por Diego de Ordás en 1519.
Los días 17 y 18 de junio, el volcán registró varios eventos explosivos de mayor magnitud, registrando fumarolas que alcanzaron los 4 km sobre el nivel del cráter y expulsiones de roca incandescente que alcanzaron las faldas en el lado Suroeste del coloso.
En 1994, los monasterios del siglo XVI, construidos en sus laderas, fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.