También existe la leyenda de que nació en Monkton, a 3 km del sitio donde más tarde se construyó el monasterio en Jarrow.[8][vii] A los treinta años, alrededor del 702, fue ordenado sacerdote, con la ceremonia realizada nuevamente por el obispo Juan.No todas su producción puede fecharse fácilmente y pudo haber trabajado en algunos textos durante un período de muchos años.[6][29] Su última obra sobreviviente es una carta a Egberto de York, un exalumno, escrita en el 734.Era considerado el hombre más erudito de su tiempo y escribió varios libros bíblicos e históricos.El martes, dos días antes de la muerte, su respiración empeoró y sus pies se hincharon.No obstante, continuó dictando a un escriba y, aunque pasó la noche despierto en oración, retomó esa tarea al día siguiente.Esa noche dictó una oración final al escriba, un niño llamado Wilberht, y murió poco después.Sin embargo, de acuerdo a sus propios cálculos de tiempo, la transición al nuevo ocurría al atardecer, no a la medianoche, y Cutberto tenía claro que murió después del atardecer.[17] El pasaje en cuestión es el único en ese libro que está escrito en primera persona: «Las plegarias se ven obstaculizadas por el deber conyugal, porque con tanta frecuencia como hago lo que es debido a mi esposa no soy capaz de orar» (Prayers are hindered by the conjugal duty because as often as I perform what is due to my wife I am not able to pray).[52] Otra frase, en el Comentario sobre Lucas (Commentary on Luke), también menciona a una mujer en primera persona: «Antes poseía una esposa en la lujuriosa pasión del deseo y ahora la poseo en la santificación honorable y el amor verdadero de Cristo» (Formerly I possessed a wife in the lustful passion of desire and now I possess her in honourable sanctification and true love of Christ).[52] La religiosa e historiadora Benedicta Ward argumentó que en estos pasajes el autor empleó una figura retórica.Conocía la literatura patrística, así como a Plinio el Viejo, Virgilio, Lucrecio, Ovidio, Horacio y otros escritores clásicos.Los estudios modernos han demostrado el rol clave que tales conceptos desempeñaron en la visión del mundo de los eruditos medievales tempranos.[65] La introducción menciona que Ceolwulf recibió un borrador del libro; presumiblemente, sabía suficiente latín para entenderlo e incluso pudo haberlo leído todo.La segunda sección, que detalla dicha misión evangelizadora, se enmarcó en la Vida de Gregorio Magno, escrita en Whitby.La última parte, que detalla los eventos posteriores a la misión gregoriana, probablemente se basó en la Vida de Wilfredo.[83] Su trabajo previo como hagiógrafo y su atención detallada a las citas fueron útiles para la labor de escribir la Historia eclesiástica.[86] La intención principal del autor era mostrar el crecimiento de la iglesia unida en toda Inglaterra.[93] El historiador Robin Fleming afirmó que, a raíz de que Northumbria había perdido su poderío por los mercios, Beda fue tan hostil con ellos no consultó a ningún informante de Mercia y no incluyó relatos sobre sus santos.[96] Aunque no lo inventó, su adopción y su promulgación en De temporum ratione, sobre cronología, es la razón principal por la que ahora se usa tan extensamente.[98][xi] El libro fue muy copiado en la Edad Media y sobreviven unos ciento sesenta manuscritos que lo contienen.Beda fue el primero en referirse a Jerónimo, Agustín, Gregorio I y Ambrosio como los cuatro padres latinos de la Iglesia.[133] También escribió varias cartas más cortas y ensayos discutiendo aspectos específicos del computus.Se convirtió en un texto de referencia para la enseñanza del verso latino durante los siguientes siglos.Fore ðæm nedfere nænig wiorðe ðonc snottora ðon him ðearf siæ to ymbhycgenne ær his hinionge hwæt his gastæ godes oððe yfles æfter deað dæge doemed wiorðe.Sin embargo, como señaló Opland, no está del todo claro que Cutberto esté atribuyendo este texto a su maestro: la mayoría de los manuscritos de Beda no usan verbos finitos —en la que hay un sujeto (expresado o implícito) y puede funcionar como la raíz de una cláusula independiente—[147] para describir su presentación en la canción; además, el tema era relativamente común en la literatura anglosajona y anglolatina.Según una leyenda, el epíteto fue dado milagrosamente por ángeles, completando así su epitafio inacabado.Para el siglo IX y XII, ese nombre se había hecho muy común.[160] En esa ciudad también hay un museo dedicado al santo y otros eventos de la herencia inglesa, en el sitio donde vivió.
Copia de la
Historia eclesiástica
en un manuscrito de finales del siglo
VIII
en la
Biblioteca Británica
.
Folio de una copia de la
Vida de
Cutberto
, que muestra al rey
Athelstan
presentando la obra al santo. Este manuscrito fue entregado al santuario de Cutberto en 934.
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110
]
El último capítulo
(1902), por James Doyle Penrose, en exhibido en la
Real Academia de Artes
. El cuadro lo muestra terminando en su lecho de muerte su traducción del
Evangelio de Juan
.