Entre sus obras más conocidas se encuentran los Conciertos de Brandeburgo, El clave bien temperado, la Misa en si menor, la Pequeña fuga en sol menor, la Pasión según San Mateo, El arte de la fuga, Ofrenda musical, las Variaciones Goldberg, la Tocata y fuga en re menor, varios ciclos de cantatas (entre ellas las célebres Wachet auf, ruft uns die Stimme, BWV 140 y Herz und Mund und Tat und Leben, BWV 147), el Concierto italiano, BWV 971, la Obertura en estilo francés, BWV 831, las Suites para violonchelo solo, las Sonatas y partitas para violín solo, los Conciertos para teclado y las Suites para orquesta.
[18][19] Gracias al contacto con estos músicos, Johann Sebastian tuvo acceso probablemente a los instrumentos más grandes y precisos que había tocado hasta entonces.
Sin embargo, en estas obras el compositor aún no había desarrollado plenamente su capacidad de organización a gran escala y su técnica contrapuntística, donde dos o más melodías interactúan simultáneamente.
Johann Sebastian quería convertirse en amanuense (asistente o sucesor) de Buxtehude, pero no quiso casarse con su hija, que era la condición para su nombramiento.
[30][31] El año siguiente tomó posesión de este mejor puesto, con paga y condiciones significativamente superiores, incluyendo un buen coro.
[32] Dos de ellos —Wilhelm Friedemann[33] y Carl Philipp Emanuel—[34] llegaron a ser compositores importantes en el ornamentado estilo galante que siguió al barroco.
En 1708, Johann Sebastian escribió la cantata festiva Gott ist mein König, BWV 71 para la inauguración del nuevo concejo de la ciudad, cuya publicación fue costeada por el ayuntamiento.
[13] Transcurrido apenas un año, le llegó en 1708 una nueva oferta de trabajo como organista desde la corte ducal en Weimar, por lo que abandonó su puesto en Mühlhausen.
Se fue a vivir con ellos la hermana mayor y soltera de Maria Barbara, que permaneció con ellos ayudando en las tareas domésticas hasta su muerte en 1729.
Tuvieron tres hijos más, que, sin embargo, no vivieron hasta su primer cumpleaños, incluidos los gemelos nacidos en 1713.
Alcanzó el nivel de competencia y confianza para ampliar las estructuras existentes e incluir influencias del exterior.
Bach interpretaba habitualmente sus propias cantatas, muchas de las cuales las compuso durante sus primeros tres años en Leipzig.
[48] La mayoría de estas obras se utilizaban en las lecturas del Evangelio prescritas para cada domingo y día festivo en el año luterano.
Es probable que para este propósito, y para el entrenamiento escolar, escribiese al menos seis motetes, la mayoría para doble coro.
Su petición de proporcionar también música para los cultos gndominicales regulares allí (con su correspondiente aumento salarial) llegó hasta el elector, pero fue denegada.
Después de esto, en 1725, Bach «perdió interés» en trabajar incluso para los servicios festivos en la Paulinerkirche y apareció allí solo en «ocasiones especiales».
Con ocasión de su entrada en la Sociedad, compuso las Variaciones canónicas sobre "Vom Himmel hoch da komm' ich her", BWV 769.
[107] A menudo se ha argumentado que otras obras tardías del compositor pudieron tener conexión con la teoría musical basada en la Sociedad.
[83] En enero de 1749, la hija del compositor, Elisabeth Juliane Friederica, se casó con su alumno Johann Christoph Altnickol.
Su tumba estuvo sin identificar durante casi ciento cincuenta años hasta que, en 1894, se encontró finalmente su ataúd y lo trasladaron a una cripta en la iglesia de San Juan.
[123] Bach también se interesaba en compositores contemporáneos, a quienes estudiaba y con muchos de los cuales mantuvo una relación personal directa.
En este período escribió obras instrumentales singularmente densas, como haría más adelante Beethoven, y su estilo personal se volvió más contrapuntístico, con apenas una leve influencia de la nueva música galante o estilo preclásico naciente en aquellos momentos, que se caracterizaba por su carácter homofónico y apenas utilizaba el cargado contrapunto que Bach usaba.
Después de Bach, algunas formas musicales, como las pasiones, las cantatas sacras, las tocatas y las fugas, fueron cayendo en desuso para los grandes compositores.
[153] Carl Philipp Emanuel y Johann Christian llegaron a ser más famosos en su época de lo que había sido su padre.
[157] Ya en su vejez, cuando la gente se refería al apellido Bach lo hacía pensando en su famoso hijo Carl Phillip Emanuel.
[158] Muchas de sus obras fueron compuestas para eventos determinados; por lo tanto, las interpretaron solamente una o dos veces y no se le ocurría que podría interesarle a alguien escucharlas otra vez.
[163] En 2005, se halló un manuscrito que contiene un aria vocal Alles mit Gott und nichts ohn' ihn, BWV 1127.
Músicos célebres, como Joseph Haydn, Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven, Felix Mendelssohn, Robert Schumann o Frédéric Chopin estaban entre sus más destacados admiradores y tuvieron un gran aprecio por las obras que conocieron de Bach; comenzaron escribiendo en un estilo más contrapuntístico después de conocer su música.
[170] La reputación de Bach entre el público en general mejoró en parte gracias a la biografía del compositor que realizó Johann Nikolaus Forkel en 1802.
[179] Según Christoph Wolff, «Bach ahora asume un lugar en la música comparable con el de Shakespeare en la literatura o Rafael y Miguel Ángel (en Alemania también Durero) en las bellas artes».