Fue una forma predominante del barroco alemán y tuvo su culminación en la obra de Johann Sebastian Bach, que escribió 47 (el n.º 47, inconcluso) ejemplos de esta forma en su Orgelbüchlein.
Si bien era una composición polifónica, la melodía tenía que ser plenamente audible.
A veces había una línea obbligato encima o debajo de la melodía.
Como género independiente, el preludio coral comenzó en la obra de Dieterich Buxtehude, que escribió 30.
Obras en esta forma continúan componiéndose hasta el día de hoy.