Una vez muerto, el cuerpo de Jorge fue enviado a Lydda para que fuera enterrado.
En el siglo IX, aparece otra popular historia: San Jorge a caballo como vencedor de un dragón.
Cuando las ovejas ya no bastaron, comenzaron a ofrecerle diariamente un sacrificio humano, que se decidía al azar entre los habitantes.
Por otra parte, pocos dudan de que contenga un rico simbolismo religioso, para el que se han propuesto diversas interpretaciones: Jorge (en árabe: جرجس, Jirjis o Girgus) encuentra presente en varias listas de profetas del islam.
Quod rex videns coepit filiam suam flere dicens: «Heu me, filia mea dulcissima, quid de te faciam?
Et conversus ad populum dixit: «Oro, ut indutias octo dierum lugendi mihi filiam tribuatis».
Tunc rex videns, quod non posset filiam liberare, induit eam vestibus regalibus et amplexatus eam cum lacrimis dixit: «Heu me, filia mea dulcissima, de te filios in regali gremio nutrire credebam et nunc vadis, ut a dracone devoreris.
Quam beatus Georgius casu inde transiens ut plorantem vidit, eam, quid haberet, interrogavit.
Cui Georgius: «Noli timere, filia, sed dic mihi, quid hic praestolaris omni plebe spectante!».
Et illa: «Ut video, bone iuvenis, magnifici cordis es tu, sed mecum mori desideras!
Cum ergo totum sibi exposuisset, ait Georgius: «Filia noli timere, quia in Christi nomine te iuvabo».
Y, girándose hacia el pueblo, dijo: «Ruego que me deis un tiempo de ocho días para llorar por mi hija».
Y dándole un beso la despidió, diciendo: «Ojalá, hija mía, me hubiera muerto antes que perderte así».
Y ella: «¡Como veo, buen joven, eres de un corazón magnífico, pero no deseas morir conmigo!
Como, en consecuencia, le expuso todo, Jorge dijo: «Hija, no temas, porque en el nombre de Cristo te ayudaré».
La canción, basada en precedentes latinos y redactada en alto alemán, cuenta el martirio del santo.
La bandera actual es una Cruz de San Jorge y el escudo tiene una representación del santo a caballo matando al dragón.
San Jorge sigue siendo venerado en Grecia, donde se le ha dado el nombre de Gran Mártir.
Posteriormente el rey Pedro I de Aragón conquista Huesca tras invocar la ayuda del santo.
Sobre todo a partir del siglo XIII surgen numerosas leyendas y apariciones en el reino.
Ya en 1386, Inglaterra y Portugal —unidas también por el patronato de San Jorge— firmaron la alianza anglo-portuguesa, que todavía sigue en vigor.
Algunas ciudades italianas, incluyendo Génova, Ferrara y Regio de Calabria, tienen a San Jorge como su patrón.
Era el antiguo emblema de los ejércitos rusos y dio nombre a la primera orden militar del país.
Por otra parte, la fiesta está relacionada con la prosperidad y cuidado de los animales: se frota con un huevo a las reses para que estén más lozanas.
Basta con poner bajo su pie el nombre de lo que se quiere resolver, aplacar, domesticar o derrotar y san Jorge ayudará en esta tarea.
San Jorge fue un soldado del Imperio romano que sufrió martirio y persecución, en el siglo IV de nuestra era.
También es patrono de diversas otras profesiones y actividades: agricultores, soldados, arqueros, prisioneros, herreros, gentes del circo, escultistas, montañeros, entre otros.
Para los drusos (en árabe: durūzī دروزي, plural: durūz دروز), es un santo protector venerado y respetado.
San Jorge se suele representar a caballo, habitualmente blanco, vestido al modo militar medieval, con palma, lanza, espada y escudo.
Se puede ver a menudo en el escudo de San Jorge en cuadros y otras representaciones.