Deriva del latino quercus, encina, y la terminación mozárabe ete.
La palabra Villanueva surgió después como topónimo castellano referido a la población de la nueva villa.
Villanueva de Alcardete tiene un clima mediterráneo continentalizado con precipitaciones escasas que se concentran en primavera y a finales del otoño, con sequía estival acusada e importante oscilación térmica diaria.
Los orígenes de Villanueva se podrían remontar a la época hispanorromana.
El más importante de estos poblados, llamado El Cardete, estaría cercano al río Gigüela, donde se han encontrado enterramientos visigodos y restos de cerámica.
En 1179 el Maestre y el Rey mejoraron la población de Uclés, otorgando a los nuevos pobladores un Fuero que hizo que creciese la población y sus términos.
El efecto de la crisis económica se fue agravando a lo largo del siglo XVII.
En 1683 la población se vio obligada a solicitar del rey que se concediese a los vecinos poder disponer del grano de la Mesa Maestral de la Tercia Real para poder sembrar, por la gran pobreza generalizada que había en la población, debido a las malas cosechas de esos años.
Los que forman el sector secundario, están presentes en menor medida, aunque en los últimos años este sector ha sufrido un fuerte incremento y se dedica principalmente a la construcción, industria textil, y a la elaboración de productos agroalimentarios destacando entre estos el vino y el queso.