Era todavía adolescente cuando se enroló en el ejército durante la guerra del Pacífico, participando en la defensa de Lima.
Representó una nueva generación de civilistas con anhelos renovadores para el desarrollo del Perú.
Su segundo gobierno (1915-1919) se caracterizó por la violencia política y social, síntoma del agotamiento del civilismo como opción política y de la crisis mundial derivada de la Primera Guerra Mundial.
Su madre fue Mariana Barreda y Osma, hija del acaudalado hombre de negocios Felipe Barreda y Aguilar, apodado «el hombre de los Cinco Millones», a través del cual estuvo emparentado con diversas personalidades políticas.
Por entonces estalló la guerra con Chile y Lima se vio asediada por fuerzas enemigas.
[4] Acto seguido, se incorporó a las filas del Partido Civil que había fundado su padre, convirtiéndose con el tiempo en uno de sus líderes.
[5] De vuelta al Perú, en 1890, Pardo abandonó la carrera diplomática para consagrarse a administrar su hacienda azucarera Tumán, en Chiclayo.
Luego, ya convertido en líder del Partido Civil, llegó a ser presidente constitucional del Perú en dos ocasiones: Después de la muerte de Candamo, el segundo vicepresidente Serapio Calderón asumió la presidencia, pues el primer vicepresidente, Lino Alarco, también había fallecido.
Pero esta oposición se hacía dentro de los marcos que permitía la ley, sin caer en excesos.
Por ello, Pardo pudo hacer algunos viajes a provincias, lo que hasta entonces no había hecho ningún presidente elegido democráticamente.
Bajo el empeño del ministro de Hacienda Augusto B. Leguía, se realizaron importantes reformas en el plano económico.
El primer gobierno de José Pardo se caracterizó por dar un gran impulso a la educación.
En 1904 y ante la creciente agitación obrera, el gobierno encargó al ilustre jurista José Matías Manzanilla la elaboración de un proyecto de Legislación del trabajo a la que generalmente se ha denominado Legislación Social.
[28] En lo que respecta a la política exterior, los puntos más críticos fueron las cuestiones limítrofes con los países vecinos.
[32][33] En lo que respecta a Colombia, se mantenía la disputa por el territorio selvático entre los ríos Putumayo y Caquetá, donde actuaban los caucheros, siendo el más célebre el peruano Julio C. Arana.
En 1906 se firmó en Lima un nuevo convenio de modus vivendi para la zona en litigio, el mismo que al año siguiente sería cesado unilateralmente por Colombia, que volvió a ejercer su jurisdicción sobre el Putumayo.
Esta república retenía ilegalmente las provincias peruanas de Tacna y Arica, pues según el Tratado de Ancón (que puso fin a la guerra del Pacífico en 1883), en 1894 debió convocar en ellas un plebiscito para que sus habitantes decidieran retornar al Perú o permanecer en Chile.
De todos modos, poco después se reanudaron las relaciones diplomáticas entre Perú y Chile.
Pero no pudo contrarrestar la exacerbada oposición que le hicieron desde el Congreso y la prensa.
[47] Dos crímenes consternaron a la población y exacerbaron más los ánimos contra el gobierno.
[51] A continuación, las obras y sucesos importantes del segundo gobierno de José Pardo.
A Pardo le tocó afrontar las consecuencias de la Primera Guerra Mundial.
Muchos en el Perú creyeron que al amparo de ese principio se podría recuperar Tacna, Arica y, eventualmente, Tarapacá.
La cancillería peruana protestó enérgicamente y retiró a todos sus cónsules de territorio chileno.
[63] Los principios wilsonianos no contribuyeron pues en nada a la solución de la espinosa Cuestión del Pacífico.
[64] El gobierno también mostró atención por resolver el espinoso problema de La Brea y Pariñas.
Por el Partido Civil (gobiernista) se presentó Ántero Aspíllaga, rico hacendado del norte, con la anuencia de Pardo.
Los comicios, que no fueron muy limpios, dieron por ganador a Leguía, pero en el recuento oficial se le anularon numerosos votos.
Exiliado con su familia en Europa, se estableció en el castillo Caradoc, Biarritz, Francia, en donde residió hasta 1944 cuando retornó al Perú.
[6] Tres años después murió en Miraflores y fue enterrado en el Cementerio Presbítero Maestro.