Segundo gobierno de José Pardo

Este gobierno sufrió una tenaz oposición, que se agudizó aún más por la crisis económica derivada de la Primera Guerra Mundial.

Al año siguiente fue designado como candidato a la presidencia por una Convención de los partidos Civil, Liberal y Constitucional, que convocó el general Oscar R. Benavides, entonces gobernante de facto.

Pardo desplazó fácilmente a su rival, el general Pedro Muñiz Sevilla, en esta especie de “primarias” electorales.

Ante ello, Benavides decidió abandonar inmediatamente el poder, para evitar que la ciudadanía le creyera involucrado en la intentona anticonstitucional.

[9]​ Lo conformaron los siguientes ministros:[10]​ Pardo se mostró respetuoso de las leyes y libertades públicas.

Pero su gobierno tuvo que afrontar una tenaz oposición periodística, representa fundamentalmente por el diario El Tiempo, dirigido por Pedro Ruiz Bravo.

Formaron parte de este gabinete: Arturo García Salazar (Relaciones Exteriores), Ángel Gustavo Cornejo (Justicia e Instrucción), el general Juan Manuel Zuloaga (Guerra), Héctor Escardó (Hacienda) y Manuel Vinelli (Fomento).

[20]​ A raíz de un atentado contra su vida que sufriera el líder del Partido Liberal Augusto Durand, Arenas renunció al gabinete, que pasó a ser presidido por el ministro de Guerra Zuloaga.

Ello impulsó los cultivos agroindustriales de la costa, instalándose grandes y modernas maquinarias en varias haciendas, como en Laredo.

Todo ello trajo inevitablemente una gran agitación social, que se vio reflejada en la ola de huelgas y paros laborales que se desataron a lo largo del gobierno de Pardo.

Ello debido al alza del algodón, que superó casi cinco veces su valor de 1913, y la del azúcar, que se elevó a casi siete veces.

Veamos la tabla:[34]​ El capital tuvo los siguientes aumentos:[28]​ Capitalización del país en este periodo.

[35]​ En el sur andino, los hacendados y gamonales cometían abusos sobre los indígenas, que fueron reducidos prácticamente a la condición de siervos.

Arrasaron la hacienda de Arias Echenique, donde hubo 60 muertos; luego hicieron lo mismo con otra en Juliaca.

[42]​ Su signo central, salvo el mitin organizado en apoyo a Billinghurst y por el "pan grande", es reivindicativo corporativo.

De ellas mencionamos las siguientes:[48]​ En el marco de la Primera Guerra Mundial, el país tuvo una posición neutral en el conflicto internacional entre los imperios centrales y el Triple Entente, aunque se pudo denotar la preferencia por este último.

Como secuela de este hecho, el Perú incautó algunos mercantes alemanes surtos en el puerto del Callao.

[51]​ Una delegación peruana se hizo presente durante las conferencias de Versalles, enfocadas a negociar la paz entre los aliados y los imperios centrales (1919).

Estaba conformada por Isaac Alzamora, Víctor M. Maúrtua y Francisco García Calderón Rey.

Desde el primer momento los peruanos vieron con desilusión que los organizadores de las conferencias, es decir las potencias vencedoras, desestimaran tratar los asuntos latinoamericanos (se había pensado en llevar a esa instancia la cuestión de Tacna y Arica).

Muchos peruanos creyeron que al amparo de ello se podría recuperar Tacna, Arica y, eventualmente, Tarapacá.

El rompimiento de relaciones con Chile llegó pues a ser total, pues al plano diplomático se sumó el comercial, con grave daño para los intereses económicos de ambas naciones.

[61]​ En el plano educacional, Pardo se preocupó del progreso de la educación en el país.

[72]​ Sin embargo, se hicieron algunos progresos, que pasamos a detallar:[73]​ Cercana ya la fecha para las elecciones presidenciales, el líder del Partido Constitucional, general Andrés A. Cáceres, se contactó con Augusto B. Leguía, quien por entonces se encontraba en Londres, invitándolo a postular a la presidencia de la República.

Leguía asumió el poder como presidente provisorio y su primer acto fue disolver el Congreso que le era adverso.

[74]​ Pardo se estableció en Biarritz, Francia, en donde residió durante 25 años, retornando al Perú en 1944.

Tres años después falleció y fue enterrado en el Cementerio Presbítero Maestro.

Consejo de Ministros encabezado por Enrique de la Riva Agüero Riglos , en 1915.
El diputado Rafael Grau , cuyo asesinato en Palcaro fue atribuido al gobierno de Pardo.
José Pardo y Barreda en el despacho presidencial (1917).
Hacienda azucarera Larco.
El sargento Teodomiro Gutiérrez Cuevas , más conocido como Rumi Maqui.
Una escena del paro de trabajadores de mayo de 1919 en Lima.
Enrique de la Riva Agüero , canciller y primer ministro del segundo gobierno de Pardo.
Francisco Tudela y Varela , canciller y primer ministro del segundo gobierno de Pardo. Luego fue el primer embajador del Perú en Estados Unidos.
José Pardo y Barreda.