[1] Su padre, Felipe Barreda y Aguilar (1805-1892), fue también un prestigioso hombre de negocios, famoso por ser uno de los llamados Barones del guano peruano, y que en 1880, durante la guerra del Pacífico, se instaló en París, donde vivió sus últimos doce años.
Luego, gracias a un préstamo de 18 000 libras que le otorgó su cuñado Domingo Laos en 1881, pudo adquirir la salitrera San Pablo, negocio entonces en gran auge, pasando así en poco tiempo de la bancarrota a la prosperidad.
Cuando fallecieron sus padres a fines del siglo XIX recibió el resto de su herencia.
[3] Se convirtió así en uno de los cuatro millonarios que vivían en Lima durante la post guerra con Chile (los otros eran Sevilla, Candamo y Oyague).
En esas elecciones ganó Guillermo Billinghurst, candidato independiente que se presentó a último momento.