Campañas del Sur

Este proyecto fracasó sin embargo y la propia Gran Colombia desapareció en 1831, balcanizada por la secesión de los estados que la constituían.[3]​[4]​ Estima que las provincias de Guayaquil, Ecuador (Quito) y Azuay podían sostener 4000 a 5000 soldados perfectamente si se lo proponen.[11]​ En total, la Real Audiencia de Quito contaba con 3500 soldados al mando del mariscal Melchor Aymerich.Ambos ejércitos se enfrentaron en la segunda batalla de Huachi, Sucre dispuso una sólida formación defensiva pero al atacar los realistas el general Mires se adelantó a la contraofensiva y, tras ser rechazado su ataque, el ejército patriota fue envuelto, derrotado y casi destruido.En tales circunstancias Sucre dirige una carta al Protector del Perú, José de San Martín, reclamando el batallón Numancia, excelente unidad formada en Venezuela en 1813 y enviada por Pablo Morillo al Perú en 1816; en 1820 se había pasado a las fuerzas del Protector y deseaban volver a casa.[nota 5]​ Bolívar realiza los preparativos ese mismo año: organiza un ejército de cuatro mil soldados, encarga la Presidencia a Santander y marcha al sur.[20]​Inicialmente el Libertador quería transportar la tropa por mar en tres bergantines; cuando se encontraba embarcándose por el puerto de Buenaventura, apareció una escuadra española enviada por Juan de la Cruz Mourgeon y Achet desde la actual costa septentrional del Ecuador, estaba conformada por una corbeta, cuatro goletas y tres transportes.El Libertador deseaba evitar Patía y Pasto, conocedor de los desastres sufridos por otros comandantes en los años anteriores.[22]​ También esperaba contar con el apoyo del gobierno chileno[23]​ y de San Martín[24]​ para liberar Quito.[28]​ Tras algunos enfrentamientos en el Valle del Cauca Calzada fue relevado de su mando y enviado a Venezuela mientras que los pastusos continuaron la resistencia.Los realistas al mando de Basilio Modesto García, en una sólida posición infligieron grandes pérdidas a los colombianos.García se retira a Pasto mientras Bolívar cruza el río Mayo y acampa en la altura denominada Trapiche.Boves se retira de vuelta a Pasto, y prepara sus defensas para resistir hasta el final.[35]​ En el norte por el contrario, habiendo superado las desuniones y aglutinado en buena parte las distintas clases sociales e intereses al movimiento emancipador bajo la dirección de Simón Bolívar, dándole un carácter colectivo que rompiera con los tiempos en que solo interesaba a la aristocracia por mantener su poder y a la burguesía por alcanzar dicho poder, habían, tras varias campañas, liberado buena parte del territorio del antiguo Virreinato de Nueva Granada, que había sido reorganizado como república, la Gran Colombia, desde la que Bolívar deseaba completar su sueño americanista de unir a los antiguos dominios españoles en una sola república que tuviera la fuerza para resistir cualquier intento de recolonización española o de cualquier otra potencia.Este comprometió buena parte del ejército en campañas ambiciosas que fracasaron en las batallas de Torata y Moquegua, dejando al gobierno peruano en una delicada condición militar.[36]​ Sin embargo, los esperados refuerzos no podrían salir de los recursos quiteños, como se había especulado, la provincia estaba destruida por la guerra.[40]​ En las sierras había ocho montoneras que sumaban 649 hombres armados encabezadas por cinco capitanes, dos tenientes y sargento mayor (en la estimación no se incluyen las partidas de los comandantes Juan Evangelista Vivas en Jauja y Isidoro Villar en Cerro de Pasco).[15]​ Durante esas fechas el Libertador prometió a los gobiernos limeños de 4000 o 4500 efectivos en apoyo, no los tenía pero esperaba reunirlos en Ecuador, sin embargo, pronto se dio cuenta de que la devastada región no podría aportarle ni 3000 hombres reclutados a la fuerza, además el ejército reunido en Quito y Guayaquil apenas alcanzaba los 3000 combatientes, tendría que contentarse enviando 1700 refuerzos.[50]​ Fue el alzamiento de los pastusos y la resistencia realista en Puerto Cabello los argumentos para negar nuevos apoyos.Bolívar y San Martín consideraban la campaña demasiado arriesgada,[57]​ pero sus promotores esperaban con una doble ofensiva de 8000 soldados aniquilar los últimos enclaves realistas.Santa Cruz evitó el combate y se dirigió hacia Oruro a reunirse con Gamarra.Allí recibieron noticias de que el general Olañeta había llegado desde Potosí a incorporarse al ejército del virrey.[62]​ Bolívar expresaría su opinión de la caótica situación peruana (tres gobiernos, Riva Agüero en Trujillo, Torre Tagle en Lima y La Serna en Cuzco):Bolívar decidió enfrentar a ambos ocupando el territorio entre ambos ejércitos e impedir así que unieran fuerzas.Sucre se había negado a tomar parte en la campaña contra los rebeldes peruanos, pues creía que no debían inmiscuirse en los asuntos de dicha nación.[66]​ Pero la necesidad de enfrentar a Santa Cruz obligó debilitar las fuerzas del norte, quedando 3000 en Jauja e Ica, concentrando 4000 en Arequipa.Ante la grave situación militar el Congreso en resolución del 10 de febrero lo nombra Dictador con facultades ilimitadas.Ante la caótica situación político-militar Bolívar actuó con energía para evitar el colapso del estado peruano que parecía inminente.Las deserciones continuaban entre las fuerzas peruanas, e incluso el expresidente Torre Tagle se unió a los españoles.[81]​ En Potosí se sublevó el general Olañeta, contrario a las tendencias liberales del virrey La Serna.
Campañas de independencia en Venezuela , Nueva Granada y Quito entre 1821 y 1823.
Simón Bolívar sentado en la piedra, durante la batalla. Composición simbólica de la Batalla de Bomboná .
Campañas de independencia en Quito , Perú y el Alto Perú entre 1823 y 1826.
Tropas Gran colombianas contra las de Agualongo durante la batalla de Ibarra