[6] El condado castellano se convirtió así en parte del patrimonio regio.Desde el comienzo de la Reconquista la frontera del Ebro había sido disputada entre musulmanes, leoneses, navarros y aragoneses.Su favorito, Alfonso, recibió el reino de León[7] y la primacía que este título le otorgaba sobre sus hermanos.[9] La división duró poco: entre 1071 y 1072 Sancho derrocó a sus hermanos y se anexionó sus estados,[10] pero murió asesinado este último año,[11] con lo que su hermano Alfonso VI logró reunificar de nuevo la herencia de Fernando I, que permaneció indivisa hasta 1157.Asimismo, aprovechó la debilidad del reino almohade para avanzar enormemente la Reconquista, tomando el valle del Guadalquivir mientras que su hijo Alfonso conquistaba el Reino de Murcia.Las Cortes se articulaban en tres brazos que correspondían respectivamente a los estamentos noble, eclesiástico y ciudadano y aunque el número de ciudades representadas en Cortes fue variando a lo largo del tiempo, fue el rey Juan I el que fijó de una manera definitiva las ciudades concretas que tendrían derecho a enviar procuradores a Cortes: Burgos, Palencia, Toledo, León, Sevilla, Córdoba, Murcia, Jaén, Zamora, Segovia, Ávila, Salamanca, Cuenca, Toro, Valladolid, Soria, Madrid, Guadalajara y Granada (a partir de 1492).La justificación providencialista de los orígenes de cada reino y su primacía eran una cuestión importantísima (no solo en la Edad Media, sino durante todo el Antiguo Régimen), y se suscitaron debates en cuanto a la entidad sobrenatural que debía ejercer el patronazgo y en qué territorio en concreto, con consecuencias incluso fiscales.En los últimos años de Fernando III, el castellano se comienza a utilizar para ciertos documentos.Otras fuentes indican que los textos árabes de tierras de Al-Ándalus recién reconquistadas fueron traducidos al castellano y no al latín (por la mayor simplicidad lingüística del castellano).[¿quién?]A Alfonso X le sucedería su hijo Sancho IV en 1284 y a este, su hijo Fernando IV en 1295, que durante su minoría de edad, regentaría el Reino su madre la reina María de Molina.Finalmente Enrique venció en 1369 en la batalla de Montiel, y dio muerte a Pedro.Álvaro de Luna ganó la guerra y expulsó a los infantes.Enrique IV intentó restablecer sin éxito la paz con la nobleza, rota por su padre.El rey, asediado por las revueltas y las exigencias de los nobles, tuvo que firmar un tratado por el que nombraba heredero a su hermano Alfonso, dejando a Juana fuera de la sucesión.Enrique IV, además, quería aliar la Corona castellana con Portugal o Francia en vez de con Aragón.La aristocracia castellana era poderosa gracias a la Reconquista (como pudo comprobar Enrique IV).Se presiona para la conversión de los judíos y en algunos casos son perseguidos por la Inquisición.Finalmente en 1492, para aquellos no conversos, se decide su expulsión, estimándose que unas 50 000 a 70 000 personas debieron abandonar la Corona de Castilla.Pero Isabel sabía la enfermedad que padecía su hija (por la cual era conocida como Juana la Loca) y nombra regente a Fernando en caso de que Juana no quisiere o pudiere entender en la gobernación de ellos.En 1506 muere Felipe I y Fernando el Católico vuelve de nuevo a la regencia.La nobleza castellana y las ciudades estaban cerca de un levantamiento para defender sus derechos.En las Cortes castellanas en Valladolid en 1518, se nombra presidente a un valón (Jean Sauvage).Esto provoca airadas protestas en las Cortes, que rechazan la presencia de extranjeros en sus deliberaciones.Los representantes que votaron a favor son atacados por el pueblo castellano y sus casas quemadas.Uno de ellos nada más acceder al trono Carlos I, en 1516, que fue pronto atajado.Finalmente, en 1528, Carlos I se retiraría del territorio de Baja Navarra al no poder defenderlo eficazmente, y abandonando sus pretensiones sobre él, y sin que existiera ningún tratado formal entre los reyes de Navarra y Carlos I. Felipe II siguió la misma política que Carlos I.Desde Carlos I la carga fiscal del imperio recaía principalmente en Castilla, y con Felipe II se cuadruplicó.Durante su reinado, además de subir los impuestos existentes, implantó otros nuevos, entre ellos el excusado en 1567.En 1590 se aprueba en las Cortes el Servicio de Millones, un nuevo impuesto que gravaba los alimentos.Esto terminó por arruinar a las ciudades castellanas y eliminó sus débiles intentos de industrialización.
Batalla naval de La Rochelle
(miniatura francesa del siglo
XV
). En ella la flota de la marina castellana, formada por naves cántabras y vascas, obtiene una victoria contundente frente a la armada inglesa, pasando el control del
canal de la Mancha
a manos de la Corona de Castilla.