Providencialismo

Aunque podría verse providencialismo en los mitos clásicos, el papel de los héroes homéricos y trágicos era autónomo, cabiendo incluso la soberbia (hybris) o la grandeza de la rebeldía humana frente a un destino (fatum) prefijado.

Es más fácil aceptar que Atila, sin ninguna virtud propia, venza por ser el azote de Dios.

Como extensión del concepto, no sólo otras religiones no cristianas, sino cualquier concepción de la Historia que ponga su protagonismo en instancias superiores al hombre (la raza, la nación) puede tener puntos de contacto con el providencialismo.

Por tanto se trata de una verdad religiosa, no científica (Popper), que proporciona consuelo a los individuos y estabilidad al grupo social.

Los designios de Dios son inescrutables y la sabiduría del hombre limitada para comprenderlos.

Sin embargo, algunos pensadores, como Emil Kauder, han criticado la teoría dweberiana del origen protestante del capitalismo, afirmando que el capitalismo surgió mucho antes de la revolución industrial y el protestantismo, en la Edad Media tardía.

Manuscrito de Civitate Dei, de Agustín de Hipona.