Posee un clima mediterráneo continentalizado con grandes oscilaciones en sus temperaturas tanto estacionales, como diurnas y nocturnas.
Predomina el viento denominado "cierzo", y su temperatura media anual es de 11,1 °C.
El origen de Santa Eulalia del Campo, se puede asociar a una antigua villa denominada “Tres Torres”, como así lo atestigua su escudo.
Este doctor en Derecho fue además un político liberal, prolífico escritor, historiador y geógrafo.
En la plaza la localidad que lleva su nombre, se levanta el busto de Antillón, realizado en piedra.
Existen varias formas de llegar a Santa Eulalia: Por Santa Eulalia pasan y confluyen muchos Caminos Naturales Históticos y Culturales, tanto Nacionales como Internacionales.
Es una ruta de senderismo ecuestre y a pie, especialmente valorada por los cicloturistas.
Entre los años 2020 a 2023, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, realizó algunas inversiones para habilitar los tramos entre Calatayud - Daroca - Caminreal - Fuentes Claras - Ojos Negros, con la finalidad de unir el trazado del Camino Natural Santander - Mediterráneo a la Vía Verde de Ojos Negros.
Lorenzo envió el Santo Grial con varios emisarios a su ciudad natal, Huesca.
Finalmente 8 Diputaciones Provinciales se unieron a lo que hoy es el Consorcio del Camino del Cid [19], creando una ruta (Gran Ruta GR-160) de más 2.000 kilómetros, que atraviesa otras tantas provincias españolas (Burgos, Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante) de cuatro comunidades autónomas (Castilla y León, Castilla-La Mancha, Aragón y Comunidad Valenciana).
En la actualidad, se conservan seis piedras armeras enclavadas en otras tantas casonas.
En Santa Eulalia se le conoce popularmente como la Ermita de San Antón.
La biblioteca pública municipal Isidoro de Antillón y Marzo se encuentra en la plaza del mismo nombre.
Entre las muchas casonas nobiliarias que pueblan la localidad, destaca la Casa Palacio de Antillón.
Es la Casa más importante de Santa Eulalia, y fue construida en el siglo XVI.
Las fiestas patronales se celebran en la segunda quincena de agosto, en honor a la Virgen del Molino.
Fue una niña mártir del siglo IV que nació en los alrededores de Barcelona.
Estos eran los que iban a ir al servicio militar obligatorio ese año (conocido coloquialmente como "la mili").
Los quintos se encargaban de ir al monte, cortar un árbol y plantarlo luego en la plaza del pueblo.
De destacar son también los actos que se celebran durante la Semana Santa en la localidad.
La Cofradía y Hermandad de la Sangre de Cristo y de la Misericordia realiza varios actos durante la Semana Santa, pero quizás lo más destacado sea el acto del Abajamiento o descendimiento del Cristo Crucificado para trasladarlo al féretro que por la noche saldrá en la Procesión del Viernes Santo.
Santa Eulalia del Campo atesora numerosos e interesantes atractivos turísticos dentro de su término municipal, tanto de carácter artístico, como cultural, deportivo o histórico, pero si por algo destaca esta localidad, es por ser una verdadera “base logística” a donde llegar fácilmente, aprovisionarse, regresar y descansar de las numerosas excursiones diarias, a innumerables lugares de alto valor turístico, cultural, deportivo e histórico que se encuentran muy próximas a la localidad.
A Santa Eulalia del Campo dispone de unas comunicaciones privilegiadas en su entorno.
Desde el puente se ven compuertas y tajaderas que son la herramienta de manejo del agua para uso agrícola.
A ambos lados del camino podemos ver pequeñas parcelas de cultivo, principalmente cereal.
Ruta a pie El conjunto arquitectónico de la localidad revela un histórico pasado.
Andamos dos pasos más y nos encontramos con la Casona de los Dolz del Castellar.
Continuamos nuestro paseo por la Calle San Pascual, más conocida como el Barrio Verde hasta llegar a la Calle La Unión donde descubrimos la casa conocida como “Casa Grande”, construida en 1647, sus armas hacen pensar fuera propiedad de los Pérez de Liria.
El escudo está labrado en la misma piedra de color rojizo utilizada en la fachada principal.
Finalizaremos nuestro recorrido en la calle San Antonio, justo en frente de la Casa Natal de Antillón, en la que volvemos a encontrarnos con una capilla, en este caso en honor al santo cuyo nombre lleva la calle.