En el asedio se enfrentaron las tropas aragonesas, auxiliadas por las órdenes militares, y los almohades, siendo finalmente los últimos los derrotados.
En 1210, la escuadra almohade con base en las Islas Baleares (conquistadas por éstos en 1203),[1] dirigida por Abubola el Mayor,[2] lanzó una terrible incursión sobre la costa catalana.
[3] Las fuerzas musulmanas, que aunaban tropas del Magreb y Al-Ándalus, desembarcaron y se hicieron con un gran botín, además de conseguir muchos cautivos.
[4] Entre los objetivos de este contraataque estaba Al-Dāmūs (actual Ademuz), una fortaleza que formaba parte de la red defensiva del río Turia.
La fortaleza pasara de nuevo a manos almohades en 1210 en una ofensiva que también recuperara Castielfabib, pero no Moya.