[3] El regreso de Muhámmed V en 1362 hizo que su apoyo a Pedro I aumentara al constatar las relaciones entre Aragón y Enrique.
Muhámmed V atacaría Algeciras mientras que el portugués haría lo mismo contra diversos emplazamientos en Galicia.
La conjunción de las disminuidas defensas físicas y la escasa guarnición que poseía la ciudad tras el desplazamiento de las tropas hacia el norte ocasionó que el asedio musulmán resultara demoledor para la ciudad.
[6] Los ataques se centraron en primer lugar en la Villa Nueva de la ciudad, situada al sur.
No ocurren en estos tiempos sucesos notables en la ciudad y prácticamente desaparece de las fuentes escritas.
En estas circunstancias se contempla desde el reino nazarí la consolidación de sus fronteras con Castilla.
La decisión es clara, la ciudad de Al-Yazírat debe ser abandonada para concentrar los futuros esfuerzos defensivos en la cercana Gibraltar.