Más tarde, sirvió como refugio, fábrica, sede de una orden religiosa, fortaleza y cantera.
Junto al Coliseo, se encuentran las estancias que actualmente en ruinas, sirvieron para la atención y entrenamiento de los gladiadores.
[10] La denominación Anfiteatro Flavio todavía se utiliza hoy en día, pero la estructura es más conocida popularmente como Coliseo.
[14] El emplazamiento elegido era un llano entre las colinas de Celio, Esquilino y Palatino, a través del cual fluía una corriente canalizada.
En ella ordenó construir una laguna artificial, la Stagnum Neronis, rodeada de jardines y pórticos.
[17] Asimismo, se celebraban naumachiae, espectaculares batallas navales que requerían inundar la arena de agua.
[2] Dión Casio dice que se mató a más de 9000 animales salvajes durante los juegos inaugurales del anfiteatro.
[13] Durante los siglos XVI y XVII, funcionarios de la Iglesia buscaron un papel productivo para el casco en ruinas del gran Coliseo.
El siglo XIX, en cambio, comenzaron una serie de obras para estabilizar muchos monumentos antiguos.
El 1820 se terminaron varios contrafuertes, restauración llevada a cabo por orden de Pío VII, que son claramente distinguibles hoy en día, y sin los cuales el edificio probablemente se habría derrumbado.
Durante todo el siglo se sucedieron obras de consolidación y mejora, en un proceso que aún continúa.
En el año 1936 Mussolini la mandó demoler por «molestar» por la creación de la Via dei Fori Imperiali.
Ha sido llevado al cine en múltiples ocasiones, destacando sobre todo la reconstrucción digital mostrada en la película Gladiator.
[22] Desde 2000, las autoridades mantienen el edificio iluminado durante 48 horas cada vez que en algún lugar del mundo se le conmuta o aplaza una sentencia de muerte a un condenado.
[3] El edificio se basa en una construcción arquitrabada y rodeada a los tres primeros pisos que lo conforman.
Se ha sugerido que obedecen a la necesidad de evacuar el agua tras los espectáculos navales.
La cubierta de madera ya no se conserva, con lo que todo el laberinto subterráneo permanece hoy al aire libre.
Estaban tan bien diseñados que los 50 000 espectadores podían ser evacuados en poco más de treinta minutos.
Los tres órdenes inferiores los forman 80 arcos sobre pilastras y con semicolumnas adosadas que soportan un entablamento puramente decorativo.
Era corriente superponer estilos diferentes en pisos sucesivos, pero no era habitual hacer edificios con cuatro órdenes superpuestos.
Al parecer las cuerdas se anclaban en el suelo, pues de otro modo los mástiles soportarían demasiado peso.
Tenían un fuerte elemento religioso, pero también eran una demostración de poder e influencia familiar, y resultaron ser increíblemente populares en la plebe.
[20] Durante los primeros días del Coliseo, los escritores clásicos decían que el edificio servía para naumachiae (más conocidas como navalia proelia) o simulaciones de batallas navales.
Tal empeño y capacidad de resistencia fue recompensado con el clamor popular, que llevó al César a perdonarles.
De todas formas, esta creencia parece haber surgido durante el siglo XVI.
Parte de la estructura estaba habitada por una orden cristiana, pero aparentemente no tenían motivos religiosos ni espirituales para vivir allí.
[20] Parece que durante los siglos XVI y XVII empezó a considerarse lugar santo al Coliseo.
Como respuesta a la propuesta que algunos años después hizo el Cardenal Altieri de convertir el Coliseo en una plaza de toros, Carlo Tomassi publicó un panfleto como protesta a lo que consideraba una profanación.
[20] La controversia que siguió persuadió al papa Clemente X para que cerrara las arcadas externas del Coliseo y lo declarara santuario cristiano, aunque el debate sobre cuán sacro era el edificio continuaría por algún tiempo más.
[39]Este fenómeno de ilegalidad en el área del Coliseo es un problema persistente que ha desafiado a varias administraciones municipales, a pesar de las ordenanzas y prohibiciones implementadas y los desafíos legales en el TAR (Tribunal Administrativo Regional).