[2] Gerasa, aunque formaba parte del Imperio romano, permaneció profundamente influenciado por las tradiciones griegas.
Todos los edificios tienen la particularidad de estar construidos en aparejo mediano o grande, con junta apretada.
El único monumento que se conserva en la península itálica que tiene una bóveda de crucería bien emparejada en piedra tallada es el mausoleo de Teodorico, el rey ostrogodo, construido en Rávena en 530.
La forma en 'zigzag' de ensamblar las dovelas en la fachada, aunque se practica en el Imperio romano durante la época imperial, sólo parece practicarse en el siglo en Oriente Próximo, lo que lleva a plantear la hipótesis de que el artífice del mausoleo podría proceder de Siria o Asia Menor.
Abandonada por la bóveda de crucería en el gótico, se recupera con nueva fuerza y brío constructivo en el Renacimiento, sobre todo en el Quattrocento italiano donde Brunelleschi es firme defensor de sus posibilidades constructivas y decorativas.