Arcada

En algún uso se denomina "arcada" a la abertura del arco, que más propiamente se denomina "luz"; y "arquería" a un conjunto de arquerías falsas (de una abertura cintrada cuya luz está cegada por una superficie vertical), simulada, fingida (solamente pintada y cuyo destino frecuente es restablecer simétricamente una arcada real sobre una superficie plana soliendo estar circuída de moldura saliente) o decorativas, que en su caso se denominan arcada ciega (cuya luz está tapada por el paramento del muro pero cuyo perfil de arquivolta sobresale), o arquillos lombardos.Cuando una conducción de agua ha de atravesar un valle o depresión, si el rodeo resulta muy costoso, se eleva el canal sobre una arquería que permite superar el obstáculo sin que la conducción pierda la pendiente adecuada.En nuestro tiempo es frecuente denominar estas arquerías con el término «acueducto», con lo que se da lugar a una confusión, pues este término debe emplearse para denominar todo el conjunto completo de elementos que integran una conducción.Las arquerías pueden basarse en dos principios estructurales: Es posible que estas estructuras se combinen en obras mixtas.En el «tipo Mérida», en cambio, la rotura de uno o varios arcos puede debilitar el conjunto, pero los pilares se mantienen íntegros durante el tiempo suficiente para posibilitar las reparaciones necesarias (e incluso para sobrevivir a los siglos).Si bien es posible encontrar arquerías construidas en su totalidad de mampostería, no ocurre lo mismo con el ladrillo, que solamente aparece como revestimiento del hormigón.La técnica de construcción del hormigón revestido consiste en ir levantando primero los paramentos exteriores por bandas o hiladas.
Detalle arquitectónico de una casa en Campeche .
Superposición de órdenes de arquerías en el Coliseo , Roma.
Torre y Catedral de Pisa , donde las arquerías son un elemento decorativo y estructural fundamental.
Arquería llamada «Puente del diablo» en el acueducto de Segovia.
Arquería llamada «Los Milagros» en uno de los acueductos de Mérida (Badajoz).
Restos del acueducto romano de Los Bañales.