Antigua Corinto

Corinto (o Korinto) (en griego: Κόρινθος, Kórinthos; en latín: Corinthus) fue una ciudad-estado (polis) ubicada en el istmo de Corinto, la estrecha franja de tierra que une el Peloponeso con la Grecia continental, a medio camino entre Atenas y Esparta.

[4]​ La zona del istmo estuvo ampliamente habitada en la época micénica, pero no se han hallado restos de ninguna estructura palacial en el área.

[11]​[Nota 1]​ Posteriormente, Telestes fue asesinado por Arieo y Perantas, que a su vez eran baquíadas.

[12]​ Gobernaron como un grupo: se elegía anualmente un pritano, quien ocupaba el cargo real[Nota 2]​[13]​ por un breve plazo,[11]​[14]​ sin duda, un consejo (aunque no está documentado específicamente en los materiales literarios) y un polemarco para comandar el ejército.

Durante el gobierno baquíada, de 747 a 657 a. C.,[Nota 3]​ Corinto se convirtió en un Estado unificado.

Para 730 a. C., Corinto emergió como una gran ciudad griega, gracias al comercio marítimo y el desarrollo de su industria cerámica.

[18]​ Así, en 657 a. C., los Baquíadas fueron expulsados por el tirano Cípselo, cuya propia madre era de dicho linaje, pero, por ser pobre se casó fuera del clan.

En el 635 a. C. la colonia de Corcira derrotó a su metrópoli en una batalla naval, pero después fue nuevamente sometida.

Con la Paz de Nicias del 421 a. C., los corintios no se quisieron sumar e intentaron configurar otra liga con Argos, Mantinea y Élide, pero pronto volvió a formar alianza con Esparta, que se mantuvo hasta el final de la guerra.

Según Jenofonte, los argivos aprovecharon esta situación para anexionarse Corinto, pero más probablemente el filolaconio Jenofonte convirtió en sinecismo o unión política la presencia de una guarnición militar argiva en el Acrocorinto, la ciudadela o acrópolis corintia.

En 223 a. C., la ciudad fue ocupada por Antígono III Dosón que la quería como base contra la Liga Etolia y Cleómenes.

Pablo de Tarso fundó un grupo cristiano el año 50, al cual dirigió sus epístolas.

En la cima se hallan restos de numerosos edificios que incluyen iglesias bizantinas, torres venecianas y mezquitas turcas.

El primero en recordarlo es Ciriaco de'Pizzicolli di Ancona, famoso navegante, anticuario y humanista que visitó Corinto en 1436.

Le Sieur Du Loir, que estuvo en Corinto antes de 1654, e incluso Jacques Spon y George Wheler, que la visitaron en 1676, encontraron un templo con doce columnas en pie (once del peristilo más una columna aislada en la zona del opistodomos.

Julien David Le Roy, que la vio poco después, probablemente exagera cuando dibuja el templo con catorce columnas (trece más una).

Cuando J. Stuart visitó el edificio en 1776, se habían añadido pequeñas habitaciones turcas, pero todavía permanecían en pie once columnas del peristilo y una más aislada.

Las otras cuatro habían sido reducidas a fragmentos por el gobernador turco antes de 1818 para construir una casa.

El primer estudio científico del monumento se debe al célebre arquitecto y arqueólogo alemán Wilhelm Dörpfeld en 1886.

[31]​ Más retrasados respecto del ágora estaban los templos K y D: el primero orientado de manera diferente que los otros, podía estar dedicado a Apolo, el segundo parece estar consagrado a Hermes.

Pausanias vio una estatua suya en el interior y otra delante de la cella,[32]​ quizá sobre una base circular que se ha encontrado allí.

Más al este se elevaba la llamada facha de los prisioneros, es decir, el acceso monumental desde la plaza a una gran basílica romana construida longitudinalmente en la calle del Lequeo.

La alta fachada estaba integrada por un pórtico en dos planos, en el que al menos cuatro columnas del plano superior habían sido sustituidas por estatuas colosales de bárbaros prisioneros erigidas en piares y apoyadas sobre plintos.

En los prisioneros se reconoce a los partos vencidos por él, en los plintos están representadas la Victoria y la Partia sojuzgada.

Cada tienda estaba dividida en dos ambientes, en el primero se encontraba un pozo de agua que llegaba desde la fuente Anfítrite.

Se ha pensado también en el Capitolio, el templo de la tríada capitolina: Júpiter, Juno y Minerva, o en un Augusteo, es decir, en un templo dedicado a la familia imperial julio claudia, fundadora de la nueva Corinto.

La orchestra semicircular del teatro podía ser también ampliada para organizar allí espectáculos acuáticos, los llamados tetimimos, representaciones míticas en honor de Tetis.

[43]​ Las excavaciones se desarrollaron también a lo largo de la ancha calle pavimentada que llevaba del ágora hacia el Lequeo, flanqueada por estrechas aceras y bordeada de pórticos, que permitían poder pasear tanto al sol como a la sombra.

La presencia de peldaños muestra que la zona no era utilizada para el tráfico rodado.

[45]​ Del Asclepeion proceden muchos elementos anatómicos de terracota (brazo, piernas, manos, pies, etc.) ofrecidos al dios pro una curación obtenida.

Estatero típica de Corinto con el caballo Pegaso , h. 345-307 a. C.
Ilustración del Acrocorinto.
Termas romanas de Corinto.
Templo de Apolo de Corinto.
Calle del Lequeo.
La bema.
Estoa sur.
Templo E.
Odeón.