En arquitectura, una exedra, palabra proveniente del griego exedra, "sala de reunión con asientos"[1] es, generalmente, una construcción descubierta, de planta semicircular, con asientos y respaldos fijos en la parte interior de la curva.
Las exedras se colocan a menudo en la fachada de un palacio, pero diseñadas como abertura en la pared interna.
En la casa griega y romana estaba abierta al peristilo.
La exedra fue ampliamente adoptada por los romanos para consolidarse en épocas históricas posteriores.
En la basílica paleocristiana, la exedra presenta bancos de perfil semicircular elevados por escalones.