Economía del Imperio bizantino

Constantinopla fue un centro principal en una red económica que en varias ocasiones se extendió por casi toda Eurasia y el norte de África.Las conquistas árabes, sin embargo, representarían un declive sustancial de las fortunas que contribuyó al estancamiento.[1]​ Estiman que durante el período de Diocleciano a Marciano, la población y la agricultura del Imperio Oriental disminuyeron poco.En realidad, las pocas cifras conservadas muestran que las ciudades más grandes del este crecieron algo entre los siglos III y V.[2]​ Por el reinado de Marciano, las dificultades del Imperio Oriental parecen haberse aliviado, y siendo probable que la población haya comenzado a crecer por primera vez en siglos.Su sucesor , Justino I, acrecentó el tesoro pese a que al celebrar su consulado se gasto 3 700 libras de oro.Como las monedas de oro se gastaban en soldados para servir en el ejército, que con el tiempo gastarían su dinero en adquirir sus propios bienes y muchos ingresos volverían al estado en forma de impuestos.El comercio durante este período se desplomó, por lo que solo contribuyó con 200 000 nomismata por año.Todos estos gastos significaron que el gobierno bizantino tenía solo alrededor de 100 000 nomismata en ingresos excedentes cada año por tratados, sobornos o regalos.[15]​ Sin embargo, la economía bizantina entró en un largo declive hasta que la dinastía Comena pudo revivirla.[22]​ La fuente principal de la riqueza del estado en el siglo XII fue el kommerkion, un arancel aduanero aplicado a Constantinopla sobre todas las importaciones y exportaciones, que se informó que recolectó 20 000 hyperpyra por día.[30]​[31]​ Los empobrecidos emperadores latinos derritieron estatuas por monedas, mientras que los venecianos exportaron sus ganancias decrecientes, junto con las reliquias y la arquitectura selecta para sus iglesias.Miguel VIII Palaiologos se esforzó por restaurar la grandeza de la capital, pero los recursos del imperio eran inadecuados.En 1321, solo con un esfuerzo extremo, Andonikos II fue capaz de recibir ingresos a 1 000 000 hyperpyra.Cuando el emperador Juan VI Kantakouzenos intentó reconstruir la marina bizantina, solo pudo levantar una inadecuada de 50,000 hyperpyra.Cuando el emperador Juan V Paleólogo fue capturado por Iván Alejandro en 1366, se vio obligado a pagar un rescate de 180 000 florines.[48]​ La moneda era la forma básica de dinero en el Imperio Bizantino, aunque existía el crédito: hay archivos que nos sugieren que tanto los bancos como los banqueros no eran tan primitivos como a veces se ha sugerido.[52]​ Durante la historia bizantina, la supervisión de las cecas[53]​ perteneció al Emperador; así el gobierno controlaba, hasta cierto punto, la oferta monetaria.[57]​ El peso y la pureza de la acuñación se unieron a otro elemento: la autenticidad del sello, que sirvió para garantizar los otros dos.El comercio de esclavos se atestigua, tanto a  nombre del estado como, posiblemente, por individuos privados.[69]​ El imperio también tenía actividad comercial a través de Venecia (siempre que este último fuera parte del imperio): sal, madera, hierro y esclavos, así como productos de lujo del este, fueron los productos intercambiados.[71]​ La Cuarta Cruzada y la dominación veneciana del comercio en el área crearon nuevas condiciones.En 1261, los genoveses recibieron generosos privilegios aduaneros y, seis años después, los venecianos recuperaron su barrio original en Constantinopla.Los funcionarios bizantinos que implementaron una política regulatoria utilizaron las prerrogativas estatales como apoyo a sus negocios privados.La actividad comercial privada también se vio afectada por las crisis en la política exterior y la erosión interna de Bizancio.[77]​ La distinción entre un terrateniente y un arrendatario agricultor (paroikos) se debilitó una vez que las tenencias de  paroikoi se consideraron hereditarias, y una vez que el paroikoi alcanzaba el estatus de propietario.[78]​ Desde el siglo X en adelante, las grandes haciendas asumieron el papel principal que habían tenido hasta entonces las aldeas, aunque en una economía que en lo sucesivo estaba orientada hacia la demanda, con los intercambios monetarios tomando una mayor proporción.Las aldeas que se sabe que poseían el estatus de comuna en el siglo X se convirtieron en haciendas del fisco, después de lo cual podrían ser cedidas a un monasterio o laicos.Estos territorios se dividieron entre los pequeños estados griegos y latinos, perdieron gran parte de la cohesión que pudieron haber tenido: el estado bizantino no pudo funcionar como una fuerza unificadora y, en el siglo XIII, hubo muy poco para reemplazarlo.[87]​ Esto daría como resultado un PIB total entre $ 16 y $ 27 mil millones en términos de hoy.
Parable De los Trabajadores en la Viña. Trabajadores en el campo (abajo) y tiempo de paga (arriba), Evangelio bizantino de siglo XI .
Estatua de pórfido de los tetrarcas . Fue saqueado de Constantinopla y colocado en la fachada de la iglesia de San Marcos , Venecia.
Ley del emperador bizantino Anastasius I (491-518) regulando el paso a través de los Dardanelos .
Solidus de oro de Justiniano II Rhinotmetos (4.42 g). Acuñado después de 692. [ 49 ]
Medio stavraton emitido por Manuel II (3.53 g). El su inscripción de lee "Manuel en Cristo [nuestro] Dios, fiel emperador ." [ 61 ]
Mapa que muestra las principales rutas comerciales de los varegos . La ruta comercial de los varegos a los griegos se muestra en morado. Otras rutas comerciales de los siglos VIII-XI se muestran en naranja.
El Sudario de Carlomagno , una seda bizantina policroma, siglo IX. París, Musée Nacional du Moyen Âge .