Un tejido o, en lenguaje más popular, tela[nota 1] es un material textil.
Los tejidos pueden elaborarse con distintas estructuras: Tienen como base tres tipos de fibras: naturales, artificiales y sintéticas.
Las naturales proceden de plantas o animales, como la lana, el algodón, la seda y el lino.
Las fibras artificiales están manufacturadas a partir de materia prima natural, —básicamente celulosa—, como los rayones.
Las fibras sintéticas se producen por procesos químicos, como el poliéster, el nailon y el acetato.
[7] Los tejidos se tiñen con frecuencia, por lo que están disponibles en casi todos los colores.
La xilografía, que aún se utiliza en la India y en otros lugares, es el proceso más antiguo y se remonta al menos al año 220 de la era cristiana en China.
A veces también se blanquean los tejidos, haciéndolos pálidos o blancos.
[9] Esto incluye el acabado mecánico y las aplicaciones químicas que alteran la composición de los textiles tratados (fibra, hilo o tejido).
[10] Más recientemente, la investigación en nanomateriales ha dado lugar a avances adicionales, con empresas como Nano-Tex y NanoHorizons que desarrollan tratamientos permanentes basados en nanopartículas metálicas para hacer que los tejidos sean más resistentes a agentes como el agua, las manchas, las arrugas y patógenos como bacterias y hongos.
Por ejemplo, se ha demostrado que algunos tintes dispersos, ácidos y reactivos son alergénicos para las personas sensibles.